Así como el garo, una salsa fermentada de anchoas, pudo haber nacido debido a la pujanza grecolatina en el mar Mediterráneo, se considera que la salsa Worcestershire ha sido uno de los muchos legados del contacto entre la cocina india y la inglesa.
También se usa en México como condimento para el clamato y la michelada, asimismo es un aderezo muy popular que se le pone a las rebanadas de pizza (se recomienda que sea una pizza recién hecha o bien que no sea de cadena para realzar el sabor), inclusive muchos ocupan esta salsa para realzar el sabor de las carnes asadas al carbón o bien cocinadas en distintos platillos.
En Canadá se usa para el cóctel César, similar al bloody mary, sustituyendo el jugo de tomate por clamato.
En Costa Rica es muy utilizada en la gastronomía del país, para platillos típicos como los tamales o el gallopinto.
En Venezuela se le conoce como salsa inglesa y se utiliza en diversos platos como la sopa dominguera, la carne o pollo guisados y en la preparación del guiso de las hallacas, plato típico navideño.
Esta provincia ostenta el mayor consumo per cápita de salsa inglesa del país.