En 1973 Moneo había establecido su propio despacho en Madrid, compaginando desde entonces el diseño arquitectónico con la enseñanza.
A todo ello, Moneo suma su propia visión de la arquitectura histórica.
En 1976 Moneo fue invitado a los Estados Unidos, donde trabajó en el Instituto de Arquitectura y Estudios Urbanos de Nueva York y dio clases en la Cooper Union School of Architecture (Nueva York).
En 1992 Moneo recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes del Gobierno Español.
En 1998 recibe el Premio Feltrinelli de le Academia Nazionale dei Lincei, en Roma.
Moneo dice buscar con su arquitectura la durabilidad y el diálogo con la evolución histórica.
Moneo sigue siendo considerado por numerosas personas uno de los grandes arquitectos españoles contemporáneos.
En 2013 el Estado español reclamó dos millones de euros a Moneo por «vicios ruinógenos» en el proyecto de la residencia del embajador español en Washington, Estados Unidos.[n.
Las tres obras mencionadas han contado con el beneplácito de los administradores públicos y del público general, pero han alejado su trabajo de la vanguardia disciplinar a la que perteneció en los años 80.
Moneo ha sido también un estudioso del diseño de mobiliario, que ha impulsado apoyando incluso iniciativas empresariales como B.D.