Han existido diversas entidades administrativas bercianas a lo largo de la historia.
[3] Hasta la división territorial de Floridablanca, en 1789, se unía, habitualmente, a León y Asturias,[3] refiriéndose en los documentos a ella como "Partido de Ponferrada", "Partido del Bierzo" o "Provincia del Vierzo".
[5] Como pone de relevancia el historiador astorgano José María Luengo, los bercianos seguían llamando, a El Bierzo, provincia, independientemente de la fórmula administrativa en la que se encuadrase El Bierzo.
En 1780, se constituyeron los partidos de León, Asturias y Ponferrada[7].
La provincia del Vierzo suscita numerosos problemas cuyo origen es la rivalidad entre las dos principales ciudades de la región: Ponferrada (468 vecinos) y Villafranca del Bierzo (690 vecinos) (entonces Villafranca del Vierzo) enfrentadas desde la guerra representando la primera a los nuevos poderes económicos, la nueva burguesía (comerciantes e industriales), y la segunda a los poderes tradicionales del Antiguo Régimen (pequeña nobleza, terratenientes, clericatura).
Buscando las dos candidatas apoyos y argumentos hasta el último momento, resultó que el 14 de octubre prevalecieron los argumentos de Villafranca del Vierzo, que pasó a ser la capital.
Por el Poniente, a partir del Cuadro sigue por las sierras de Palo, Pozo, Comeal hasta el puerto de Piedrafita desde donde marcha por las sierras del Cebrero y monte del Faro que dividen aguas a los ríos Valcarce y Lor, Bisuña y Quiroga, hasta buscar el nacimiento del río Soldón; marcha por el curso de este río hasta su confluencia con el Sil; sigue por la margen derecha del Sil hasta su unión con el Bibey; continúa subiendo por la margen derecha de este río hasta el pueblo de Baho inclusive.
El Bierzo se encontraba en estado de guerra desde el 16 de abril con las tropas del general Bourke a la entrada del Bierzo, preparándose para resistir, pero un armisticio (que no se había comunicado a las fuerzas bercianas comandadas por el coronel Francisco Colombo) retiró las tropas constitucionales a Lugo el 4 de julio.
Se sigue citando en los documentos oficiales locales a la extinta provincia como si siguiera vigente y los nuevos representantes ponferradinos, aunque de acuerdo con la reivindicación, siguen echando la culpa de todos los males al hecho de haber concedido la capitalidad a Villafranca del Bierzo.
En 1834, se crearon los partidos judiciales de Ponferrada y Villafranca del Bierzo.
En 1846, ante el fracaso del proyecto de Fermín Caballero, José Pérez Carús dirige un nuevo expediente, este ante la reina, movilizando a todos sus representantes, añadiéndose a ellos el cacabelense marqués de Villagarcía, Francisco Antonio Álvarez Lorenzana Armesto y Válgoma y Tejeiro, miembro del Consejo de S.M., diputado y contador general del Reino.
El propio ministro Madoz era favorable a su recuperación y en esa intención se manifestó públicamente.