Los viajes espaciales han sido durante mucho tiempo una ambición importante en la cultura francesa.Esos nombres, sus numerosos alumnos y sus trabajos marcarían desde entonces los primeros conocimientos del programa espacial francés en todo tipo de globos aerostáticos.A principios del siglo XX, los orígenes del programa espacial francés están ligados a los avances tecnológicos franceses en el sector aeroespacial y la astronáutica, en particular las nacientes industrias de aviones y cohetes.En 1973, Francia impulsó la creación de la Agencia Espacial Europea y se convirtió en su primer contribuyente.El programa espacial francés se beneficia así de la mejor posición terrestre para sus puntos de lanzamiento en la Tierra, ya que su posición a 5,3° al norte del ecuador permite a los cohetes obtener propulsión gracias al giro de la Tierra cuando se lanzan hacia el este (+460 m/s) y ahorrar propulsión.El programa espacial francés incluye colaboraciones entre sus instituciones y otros países, tanto europeos como extranjeros tales como a agencia japonesa JAXA, el ISRO, la NASA, e incluso la china CNSA, participando en proyectos que van desde el Observatorio espacial Herschel hasta BepiColombo, el SARAL y el observatorio espacial Planck.[11] Desde 2010, Francia y Rusia colaboraban en varias misiones espaciales, incluidos programas científicos de larga duración como el programa médico Cardiomed, dedicado a controlar y estudiar la salud cardiovascular de los astronautas.El CNES ha proporcionado instrumentos esenciales (cámaras) para una misión india a la Luna (Chandrayaan-1), lanzada en enero de 2018.[14] Un consorcio liderado por el CNES también construyó instrumentos Argos a bordo del Oceansat-3 de la India en 2018.[18] En 2020, la NASA lanzó el Solar Orbiter, que contiene instrumentos diseñados por el CNES y otras industrias espacializadas francesas.La construcción del lanzador Ariane 6 está en marcha, tras haber sido aprobado por todos los países de la ESA en 2016.
Cohetes tipo EA-EOLE probados entre 1940 y 1941, además de en 1951 tras la Segunda Guerra Mundial.
Cohete Ariane en el museo del aeropuerto de Le Bourget en París