Con la llegada de la gravedad al espacio hay que aclarar que un astronauta —término derivado del griego astron (ἄστρον, 'estrella') y nautes (ναύτης, 'navegante')— debe reunir ciertas características, como haber completado un entrenamiento de astronauta en una agencia espacial, o tener un título en alguna ingeniería o ciencia entre otras características más secundarias.
Si faltan estas características, lo más seguro es que la persona sea considerada como turista espacial.
El término astronauta es muy conocido y usado en el mundo, principalmente utilizado por NASA en Estados Unidos, sin embargo, existen otros nombres que utilizan otras naciones, los astronautas enviados por Rusia o la Unión Soviética se conocen típicamente como «cosmonautas» —del ruso kosmonavt (космонавт), que a su vez deriva de las palabras griegas kosmos (κοσμος, 'universo') y nautes (ναύτης, 'navegante')— para distinguirlos de los estadounidenses.
Desarrollos comparativamente recientes en vuelos espaciales tripulados realizados por China han llevado al surgimiento del término «taikonauta» —del mandarín tàikōngrén (太空人, 'hombre del espacio')—, aunque su uso es algo informal y su origen no está claro.
German Titov, cosmonauta soviético, fue el segundo hombre en órbita terrestre después de Gagarin.
Estas 30 misiones proporcionaron 71 oportunidades de vuelo individual: seis en el Mercury, 20 en el Gemini, 33 en el Apolo, nueve en el Skylab, y tres en el Apolo-Soyuz.
Sin embargo, todas las misiones del programa Apolo incluían al menos un astronauta veterano.
Este grupo, que fue conocido como los «Mercury Seven» («los Siete del Mercury»), estaba compuesto por Scott Carpenter, Gordon Cooper, John Glenn, Gus Grissom, Wally Schirra, Alan Shepard y Deke Slayton.
Tres de ellos, Gus Grissom, Gordon Cooper y Wally Schirra, también volaron en una misión durante el programa Gemini.
Seis de este grupo: Borman, Lovell, Stafford, Young, Armstrong y Conrad, viajaron a la Luna.
Fueron: Buzz Aldrin, Eugene A. Cernan, Michael Collins, Richard Gordon y David Scott.
Scott y Cernan salieron al espacio una segunda vez en otra misión Apolo.
Los taikonautas Fei Junlong y Nie Haisheng fueron los siguientes en salir al espacio en la Shenzhou 6 en octubre de 2005.
En cuanto a las funciones cognitivas básicas (percepción, memoria y pensamiento lógico) se mantienen estables.
Entre los métodos utilizados se encuentran el poner a disposición de los astronautas películas, discos, páginas personales para relacionarse con la vida en la tierra, videoconferencias familiares y una conferencia psicológica privada cada dos semanas con un psicólogo en Tierra.
En el nivel colectivo, las condiciones especiales de la vida en el espacio pueden provocar tensiones y conflictos.
Hasta 2020, once personas (todos hombres) han perdido la vida entrenando para vuelos espaciales: ocho estadounidenses y tres rusos.