Kaiserschlacht

1918 Artículos asociados Kaiserschlacht (lit. «La batalla del káiser»), también la gran batalla en Francia (Große Schlacht in Frankreich) y la ofensiva de primavera (este último incluyendo algunas acciones menores consecutivas), y denominada por los británicos la gran retirada de marzo, fue la última gran ofensiva del Ejército alemán durante la Primera Guerra Mundial.

La denominación Kaiserschlacht se atribuye al general Erich Ludendorff, con referencia al káiser Guillermo II, aunque este último no tuviera a esta altura control del Ejército ni mucho menos era partícipe de los planes militares.

Sumando la relación completa de unidades a nivel ejército conocida en el frente occidental para 1918 se obtiene solo diez batallones y cinco compañías o unos seis mil seiscientos hombres.

La reorganización redujo el corto tiempo del que se disponía para instrucción y trabajos en las posiciones defensivas.

El Real Cuerpo Aéreo en Francia contaba con 31 092 hombres y 1255 aviones operativos a los cuales, a principios de marzo, se sumaron seis escuadrones (unos 114 aviones) para reforzar al 5.º ejército.

El Ejército francés recibió sus primeros carros ligeros Renault FT-17 en marzo, pero no entrarían en acción hasta finales de mayo.

A las 9.40 a. m., doscientos mil alemanes atacaron las líneas inglesas entre Cambrai y Saint-Quentin.

Pero el avance no tuvo éxito, porque el general Ludendorff, pese a sufrir poca oposición en su izquierda, continuó concentrando sus reservas frente a Arras, donde la resistencia británica se hizo cada vez más fuerte.

Súbitamente, el 28 de marzo, Ludendorff consideró las posibilidades que se presentaban en el frente del Somme, para hacer un avance rápido y decisivo hacia París, pero ya era demasiado tarde.

Para los británicos y los franceses, es en Mount Kemmel donde la lucha es más dura, disponer de esta altura les daría a los alemanes una ventaja considerable.

Más al sur, el general Foch, comandante en jefe de los ejércitos aliados, que está preparando lo que espera ser la ofensiva decisiva en el Somme, no quería distraer a las tropas para ayudar a los anglo-franco-belgas en Ypres.

Es obvio que después de Ypres, Alemania desea emplear las fuerzas liberadas por la paz con Rusia para un esfuerzo supremo más al sur.

La ofensiva fue dirigida por el VIII ejército del general von Böhm-Ermolli y el primer ejército del general Bruno von Mudra, totalizando cuarenta y cuatro divisiones.

El objetivo de su ofensiva, cuyo nombre en código es Blücher-Yorck, es atacar al sexto ejército francés del general Duchêne, que agrupa a doce divisiones, incluidas tres británicas.

Aunque la ofensiva tenía un objetivo limitado, sus primeros éxitos persuadieron al alto mando alemán de continuar hacia París, que está a solo 130 km.

Ludendorff planea unir los dos salientes más pronunciados tomadas durante los ataques anteriores en los sectores Amiens, Aisne y Marne.

Sin embargo, el comando del Tercer Ejército francés, el general Humbert, advertido por los desertores alemanes, organizó su defensa en consecuencia ordenando que la artillería bombardee severamente a las tropas de asalto enemigas poco antes de su ofensiva.

Los Aliados, en comparación, concentraron sus fuerzas principales en objetivos esenciales (los accesos a los puertos del Canal y el cruce ferroviario de Amiens).

El ejército alemán había sufrido grandes pérdidas y ya no tenía suficientes tropas para continuar la ofensiva.

Grupo de ametralladora Vickers .
Un tanque Mark I dirigiéndose al frente