Hasta entonces, se le veía acompañado de su madre santa Isabel, su tía María y su primo Jesús, siendo ellos dos niños.Otras veces era pintado como un joven en edad madura, casi adulta, bautizando a Cristo.La flor había sido raspada y cubierta con pintura, de modo que la restauración sólo pudo desvelar su presencia pero no reconstruirla.[3] También conocido como Joven con un cordero, de esta pintura existen dos versiones idénticas, ambas situadas en Roma.La primera de ellas se encuentra en los Museos Capitolinos y la segunda, en la Galería Doria-Pamphili.Ese mismo año, otro banquero, Ciriaco Mattei, encargó a Caravaggio un Juan Bautista, para celebrar el onomástico de su hijo mayor.Es identificable como Juan Bautista únicamente por los símbolos cristianos que lo rodean, como el cordero —víctima del sacrificio— y las uvas —su jugo rojo es similar a la sangre derramada por Cristo en su pasión, y las uvas en sí son fuente de vida—.La iconografía muestra a Juan semidesnudo —de nuevo el ideal caravaggista de la belleza masculina hace su aparición—.Su principal característica es el evidente regocijo que muestra, no es una representación de Cupido sino del propio Cecco.Juan se muestra reclinado, tocando al cordero y con una sonrisa implícita en el rostro.[cita requerida] Más aún, el Cecco que posa para Juan Bautista es en todo caso pagano.A pesar de todo este éxito, Caravaggio no había tenido hasta entonces encargos por parte del clero.Algunos críticos suponen que es una irónica imitación del ignudi, de Miguel Ángel (1508-1512).Todas estas obras incrementaron la fama de Caravaggio, principalmente entre los jóvenes, quienes ya empezaban a imitarle.El Bautista de Bellini se desarrolla en un marco convencional que su audiencia conoce y comparte.Peter Robb, biógrafo de Caravaggio, señala que este cuadro es una representación psicológica del primer Juan Bautista.Caravaggio no es el primer artista en crear un Bautista desnudo —ya había sido tratado así por Leonardo Da Vinci, Rafael Sanzio, Andrea del Sarto y otros—, pero Caravaggio lo dramatiza de una forma singular.Esto lo diferencia grandemente de Rafael, quien idealiza su cuadro asemejándolo a los querubines.Según Robb, el cuadro provocó cierta consternación en Roma pues pensaban que Caravaggio había blasfemado al usar a un prostituto como modelo.Varios cardenales definieron el cuadro como «idílico», y los burócratas pidieron a Caravaggio se retractase, puesto que podría afectar su carrera.Se negó, lo que le cerró muchas oportunidades de trabajo en la iglesia.Bellori, quien visitó Malta para describir el Juan Bautista, cincuenta años después, menciona que se trató de un delito de índole sexual por lo que el pintor debió huir y refugiarse en Italia.Tras ser detenido en Malta, Caravaggio vive el período más turbulento de su vida.Huye a Nápoles, pero al ser perseguido por sus enemigos —nunca identificados—, decide refugiarse en el Palacio Colonna.Allí traba contacto con Borghese, quien pedirá a su tío el Papa perdón para Caravaggio.Se ha dicho que sus últimas obras fueron dedicadas a Scipione como una forma de agradecimiento.
Juan Bautista
, Museo Tesoro Catedrálico,
Toledo
,
España
(fotografía anterior a su restauración en 2022).