Historia de la Línea del Algarve

[1]​ En 1858, se discutió cual sería el trazado a seguir entre Beja y Faro, después la conexión ferroviaria hasta la capital del Alentejo se construiría; uno de los planos defendía que la línea debería seguir por Mértola y seguir el Río Guadiana hasta Vila Real de Santo António, existiendo un plan alternativo al paso por São Martinho das Amoreiras, Santa Clara-a-Velha - Sabóia, Ribeiro do Vale do bosque (junto a São Marcos da Serra y São Bartolomeu de Messines.

En ese momento, hubo una sequía en algunas zonas del Algarve, y las obras entre Faro y Barranco Longo se retomaron para combatir los problemas sociales causados por este fenómeno natural.

[9]​ A finales de 1876, la vía entre Faro y São Bartolomeu de Messines se encontraba totalmente asentada, faltando, tan solo, concluir la vía entre esta estación y Casével.

[14]​ Así, el ingeniero Juán Pedro Tavares Trigueiros elaboró nuevos proyectos, que contemplaban el paso frente a la ciudad, junto a la Ria Formosa, con la construcción de elevaciones para la vía y un puente móvil para el acceso de embarcaciones al puerto.

[14]​ En marzo de 1902, se creó una comisión para decidir, definitivamente, cual sería el trazado a seguir para proseguir la Línea del Sur tras Faro;[16]​ esta comisión, nombrada por una ordenanza del 27 de febrero de ese año, y presidida por el consejero Luiz Frederico de Bivar Gomes da Costa y formada por los pares Augusto César Justino Teixeira, Juán José da Silva Ferreira Netto y José Fernando de Sousa,[17]​ entregó su parecer al gobierno en el mismo mes.,[18]​ habiendo favorecido el paso de la vía férrea junto a la Ria Formosa.

[14]​ Otro proyecto para establecer la línea a lo largo de la Ria Formosa, pasando junto a las localidades de Olhão, Fuseta y Tavira, fue defendido por Pinheiro Borges.

[16]​ El trazado del ferrocarril entre Faro y Vila Real de Santo António siguió, esencialmente un trazado costero, próximo a la antigua Ruta Nacional;[28]​ entre Olhão y Fuzeta, siguió junto a la costa para evitar el terreno accidentado en el interior, y entre Fuzeta y Vila Real de Santo António, el trazado se apartó de la costa para evitar los terrenos pantanosos.

Este apeadero fue inaugurado el 1 de noviembre del mismo año.

[43]​ En 2003, se inició la preparación de la revisión del Plan Regional de Ordenamiento del Territorio, documento donde se encontraban varias sugerencias y propuestas para volver más eficaz y atractivo el transporte ferroviario en el Algarve.

La circulación automóvil será efectuada por pasos a distinto nivel.

[48]​ El presidente de la Comunidad Intermunicipal del Algarve, Macário Correia y el vicepresidente, António Eusébio, defendieron, en 2009, la construcción de una conexión ferroviaria entre esta región y España.

[44]​ En enero de 2010, una inundación cortó, temporalmente, la circulación ferroviaria entre Olhão y Fuzeta.

[44]​ En 2009, el operador Takargo preveía desviar parte de su tráfico por la Línea del Algarve.

[28]​ Se asumió, igualmente, en los inícios del siglo XX, como una alternativa en las conexiones viarias en la región, que se encontraban, en aquella altura, con graves problemas de conservación, lo que las convertía en casi intransitables durante la mayor parte del año.

[37]​ La prolongación de la Línea del Sur hasta el Sotavento Algarvio trajo alteraciones importantes en la agricultura de esta zona, porque abrió nuevos mercados, a nivel regional, nacional e internacional.

[56]​ A partir de 1906, ganó en importancia una nueva clase profesional en el Algarve: los ferroviarios[57]​

Estación de Santa Clara - Sabóia.
Estación de Vila Real de Santo António - Guadiana.