Polisacárido

Su digestión dentro de las células, o en las cavidades digestivas, consiste en una hidrólisis catalizada por enzimas digestivas (hidrolasas) llamadas genéricamente glucosidasas, que son específicas para determinados polisacáridos y, sobre todo, para determinados tipos de enlace glucosídico.Así, por ejemplo, las enzimas que hidrolizan el almidón, cuyos enlaces son del tipo llamado α(1→4), no pueden descomponer la celulosa, cuyos enlaces son de tipo β(1→4), aunque en los dos casos el monosacárido sea el mismo.Cuando las unidades que se repiten en la columna vertebral del polímero son monosacáridos de seis carbonos, como suele ser el caso, la fórmula general se simplifica a (C6H10O5)n, donde típicamente 40 ≤ n ≤ 3000.Las propiedades del glucógeno permiten metabolizarlo más rápidamente, lo que se adapta a la vida activa de los animales en movimiento.Entre los polisacáridos también se encuentran la calosa o laminarina, la crisolaminarina, el xilano, el arabinoxilano, el Manoproteína, el fucoidan y el galactomanano.[9]​ Aunque estos polisacáridos complejos no son muy digeribles, proporcionan elementos dietéticos importantes para los seres humanos.[10]​[11]​ La fibra soluble se une a los ácidos biliares en el intestino delgado, haciendo que sea menos probable que entren en el cuerpo; esto, a su vez, reduce los niveles de colesterol en la sangre.Su almacenamiento como molécula libre, dado que es una molécula pequeña y muy soluble, daría lugar a severos problemas osmóticos y de viscosidad, incompatibles con la vida celular.Los organismos mantienen entonces solo mínimas cantidades, y muy controladas, de glucosa libre, prefiriendo almacenarla como polímero.Para el almacenamiento a mayor escala de reservas, los animales recurren a las grasas, que son lípidos, porque éstas almacenan más del doble de energía por unidad de masa; y además, son líquidas en las células, lo que las hace más compatibles con los movimientos del cuerpo.Un organismo humano almacena como glucógeno la energía necesaria para no más de seis horas, pero puede guardar como grasa la energía equivalente a las necesidades de varias semanas.Se trata sobre todo de glucanos α(1→4), representados en las plantas por el almidón y en los animales por el glucógeno, con cadenas que se ramifican gracias a enlaces de tipo α(1→6).La quitina es un polímero de la N-acetil-2, D-glucosamina, un monosacárido aminado, que contiene por lo tanto nitrógeno.Se distinguen dos tipos de polisacáridos según su composición: Pruebas para detectar los carbohidratos
Estructura del glucógeno.
Estructura de la celulosa.
Moléculas de glucosa encadenadas para formar celulosa.