La Albufera proporciona los pescados más diversos, el interior carnes de calidad: cerdo, cordero, ternera.
Es muy popular en la provincia el tubérculo denominado chufa con el que se elabora la horchata valenciana, que se extiende como refresco por todo el levante español, llegando a ser popular en culinarias del interior debido a la inmigración valenciana a otras provincias españolas (caso de Madrid).
Ya se cultivaban en época romana, cereales, viña, olivos, se añaden el arroz y la chufaDesam como más característicos de las zonas más húmedas, hortalizas nuevas en al-Ándalus como la berenjena y la alcachofa, etc.
La agricultura de regadío se fue poco a poco estableciendo hasta la llegada del dominio musulmán (que se extendió entre los siglos VIII y XIII; hasta el siglo XI).
Esta convivencia con al-Ándalus por más de varios siglos dejó una cierta influencia en la cocina valenciana.
Ya durante el siglo XVI se tiene noticia del cultivo de arroz en Valencia por Francisco de Paula Martí que escribe un pequeño tratado que se acaba anejando a un estudio denominado Agricultura General de Gabriel Alonso de Herrera, este libro se publica en 1513, cuya versión reeditada por la Sociedad económica Matritense vuelve a salir en 1818.
Francisco de Paula menciona en su pequeño folleto acerca del uso y consumo del arroz: El viajero inglés Richard Ford describe algunas costumbres culinarias de Valencia en el siglo XVIII.
[cita requerida] El patrón era muy aficionado al arroz y al resto de marineros casi nunca les llegaba su ración de paella, el plato que normalmente preparaba.
Entre los caldosos se encuentra el arroz con alubias y nabos (arròs amb fesols i naps).
En algunos municipios, debido a la influencia de la cocina manchega se elaboran sus gazpachos con "pebrella" (Thymus piperella).
Entre las ollas se encuentra la olla valenciana de las tres abocás elaborada con fideos, arroz y alcachofas.
El bacalao en salazón es popular, al igual que en otras regiones españolas, de esta forma se encuentran platos como: las albóndigas de bacalao preparadas para Viernes Santo.
En el terreno de las bebidas sin alcohol se encuentra también una forma peculiar de servir el café y que se denomina: café del tiempo.
Este excelente caldo alcanzaría merecida fama durante la Edad Media aunque se tiene constancia del cultivo de la vid desde la época del Neolítico en el espacio que ahora ocupa la Comunidad Valenciana.
se destina al mercado exterior, esto hace que sus vinos tinto, blanco, rosado, brisado, rancio, dulce, espumoso de licor y espumoso aromático no sean aún muy conocidos en el resto de España.