Se trata de un municipio hispanófono, en el que el español cuenta con el predominio lingüístico a nivel legal.
La localidad está edificada sobre terreno llano, a 218 metros sobre el nivel del mar, aunque tiene una pequeña elevación sobre la que se asienta la iglesia parroquial.
Entre las monedas destaca un denario Sgdenham 140 (RRC 44.5 desde 211 a. C.) empleado para fechar la ocultación, en plena segunda guerra púnica.
Fue repoblado por el barón Cristóbal Mercader, y fue recuperándose demográficamente, a la vez que se iniciaba una época de progreso.
Tradicionalmente han destacado los cultivos de secano (vid, algarrobo, olivar), aunque en los últimos años con la implantación del riego a goteo, se han transformado zonas de secano en regadío.
En los últimos tiempos la agricultura ha ido perdiendo peso en la economía chestana, frente a los servicios y la industria.