Educado por los jesuitas, luego de su ordenación trabajó en la iglesia San Matías, en Berlín, donde conoció y trabó amistad con el nuncio Eugenio Pacelli (futuro papa Pío XII).
[2] Recibió su educación básica en la exclusiva escuela jesuita Stella Matutina en Austria, donde solo podían conversar en latín.
En 1899 conoció al papa León XIII en audiencia privada y tras ello decidió ser sacerdote.
Al principio trabajó para un familiar, el Obispo auxiliar Maximilian Gereon de Münster como capellán.
[6] En ese tiempo ocurrió un evento memorable que cambiaría su vida, cuando, al predicar su sermón, notó la presencia del nuncio papal entre los fieles presentes.
Eugenio Pacelli sabía cómo gastarle una broma: Cuando Galen le invite, en un bello día soleado, a disfrutar de la naturaleza e interrumpir el trabajo para variar la rutina, Pacelli le respondió con una carcajada: “Antes de hacer eso debo desarrollar mucha humildad y ser párroco de San Matías, para así también poder atascarme en un sermón.” Ambos recordaron este incidente y rieron cuando el ahora papa Pío XII elevó a von Galen al Sacro Colegio Cardenalicio.
Documentos en el Archivo Apostólico Vaticano, abiertos en 2003, indican que von Galen fue elegido solo después de que otros candidatos rechazaron la oferta y a pesar de la protesta del Nuncio Ogregino al en ese momento cardenal Eugenio Pacelli, expresando su opinión de que “von Galen es mandón y paternalista en sus manifestaciones públicas".
[8] Una vez electo, contra el totalitarismo nazi del Nacionalsocialismo en la educación, pidiendo a los padres que insistieran en la enseñanza católica en las escuelas.
Dado que los cristianos no son revolucionarios, le pedía a sus oyentes paciencia y entereza.
Puede muy bien denunciar a su paciente como “improductivo” y recibir instrucciones de matarle.
Su visión sobre el comunismo se había formado como consecuencia de la estalinización y persecución implacable contra los cristianos dentro de la Unión Soviética desde 1918, durante la cual virtualmente todos los obispos católicos fueron o bien asesinados o tuvieron que huir.
Dio la bienvenida a la guerra de Alemania contra la URSS en 1941 como un suceso positivo.
Von Galen, sufrió así virtual arresto domiciliario desde 1941 hasta el fin de la guerra.
Los británicos respondieron quitándole su automóvil, impidiéndole que visitara las parroquias y llevará a cabo las confirmaciones ya planeadas.
En una entrevista con medios suizos, von Galen exigió castigo justo para los verdaderos criminales nazis, pero trato humanitario para los millones de prisioneros de Guerra que no cometieron crímenes, pero les fue prohibido por los británicos contactar a sus familiares.
Criticó la costumbre británica de destituir a los funcionarios alemanes sin ninguna investigación ni juicio, haciendo notar que los nazis habían hecho lo mismo en 1933, pero al menos las víctimas de los nazis habían continuado recibiendo una pensión.
Bell encontró que Galen tenía un inmenso poder moral, pasión por la justicia, comportamiento bien educado, estaba muy preocupado por su pueblo y era un defensor del ecumenismo.
[31] Los cardenales americanos financiaron su estancia en Roma, ya que el dinero alemán no era aceptado.
Se había hecho tan famoso y popular, que luego de que el Papa le colocó el capelo rojo con las palabras: “Dios te bendiga, Dios bendiga a Alemania”, la Basílica de San Pedro tronó por varios minutos con un ‘’applauso trionfale’’ para von Galen.
Hablaron de los viejos tiempos en Berlín y von Galen estaba realmente feliz, “pues por nada en el mundo me habría perdido esas dos horas, ni siquiera el sombrero rojo.”[34] Von Galen juzgaba que Pío XII era una “persona inusualmente santa, inusualmente consciente e inusualmente buena,” pero alguien que había “obviamente olvidado todos mis malos hábitos, de otro modo no me habría dado el sombrero rojo.” Cuando la madre Pasqualina le dijo que estaría presente en su misa romana, respondió con una sonrisa: "Mejor empiezo a preparer el sermón, de otro modo me trabaría de nuevo y usted le iría a contar todo".
Franziskus Hospital de Münster debido a una infección del apéndice diagnosticada muy tarde.