Patria
La patria (del latín patrĭa, con el mismo significado)[1] suele designar al lugar natal o adoptivo al que un individuo se siente ligado por vínculos de diversas índoles, como afectivos, culturales, históricos o familiares.[2] El término latino patria fue rescatado por los humanistas renacentistas y de ellos pasó al lenguaje común.[5] Doscientos años antes en la Crónica de Ramón Muntaner también se refería con el mismo significado: natural cosa és que tota persona, e puis tota au e tota creatura ama la patria e el lloc on és nat ('es natural que cualquier persona, así como cualquier ave o criatura, ame la patria y el lugar donde ha nacido').En la obra catalana Spill de la vida religiosa publicada en 1515 se decía (en catalán): «Nuestra tierra y patria, por la cual somos creados, a la cual debemos dirigir nuestros pasos, nuestros deseos y afectos e intenciones… es la Ciudad del Paraíso… Esa ciudad es la casa del Señor... en este lugar no existe el hambre ni la sed ni necesidad alguna».Y entre esas obligaciones se encontraba la de morir por ella, siguiendo el ideal clásico del dulce et decorum est pro patria mori.[19] Por otro lado, los hombres cultos del siglo XVIII estaban familiarizados con la voz latina patria gracias a sus lecturas de los autores clásicos romanos, especialmente los del período republicano como Tito Livio que evocaban el amor de los romanos por su patria.Así se va definiendo la «patria» —como la «nación»— de una forma racionalista y contractualista, aunque sin que desaparezcan los significados anteriores.[17] La Ilustración francesa le da a «patria» una significación política de enorme trascendencia al irse deslizando hacia un campo semántico en el que se encuentran nación, soberanía, república, ciudadanía, felicidad y libertad.Así en L'Encyclopédie se define no solo como el lugar donde se nace sino como «el estado libre del que somos miembros y cuyas leyes garantizan nuestras libertades y nuestra felicidad».[27] En 1789 Cadalso en sus Cartas Marruecas considera al patriotismo como una virtud cívica única, «el noble entusiasmo.. que ha guardado los Estados, detenido las invasiones, asegurado las vidas y producido aquellos hombres que son el verdadero honor del género humano».[24] En la Revolución Francesa el término patria adquiere un sentido más emotivo que el término nación, de carácter más abstracto, y los partidarios de la Revolución frente a los defensores del Antiguo Régimen (designados como aristócratas) se definen a sí mismos como «patriotas», como ya lo habían hecho otros revolucionarios, especialmente los insurgentes americanos (patriots).Un clérigo liberal de Valladolid les dijo en su sermón a sus feligreses tras aprobarse la Constitución: «¿Habéis oído, Españoles?...