Batallas de Fernández (Herrera)

La 8.ª División boliviana desalojó fácilmente al regimiento RC-1 paraguayo del fortín Platanillos que había sido el centro de las comunicaciones entre los distintos fortines bolivianos antes de la guerra y desde allí intentó hacer lo mismo con el fortín Fernández (Herrera) defendido por el regimiento RI-1 Dos de Mayo al mando del mayor Paulino Antola que contaba con unos 1000 hombres.

Esta maniobra apuntaba al fortín Arce (Francia), centro de operaciones del ejército paraguayo hacia el sureste.

La ofensiva prosiguió hasta el 25 de enero y fue rechazada por los defensores produciéndose cuantiosas bajas en las fuerzas bolivianas que llegaron al 25 %.

Kundt insistió en capturar Fernández (Herrera) para luego, con más libertad, volver sobre Arce.

Su misión era realizar un ataque demostrativo y, si fuera posible, ocupar el fortín.

Cuando el coronel Saavedra llegó finalmente a su objetivo, se encontró a su vez aislado entre dos fuegos ya que fuerzas paraguayas ubicadas preventivamente sobre el camino que venía de Arce lo atacaron por la retaguardia.