El general Estigarribia ordenó la exploración aérea del desértico sector norte para verificar sí los bolivianos estaban construyendo nuevos caminos.
Ya en el mes de marzo, el coronel Ángel Rodríguez, del Estado Mayor boliviano, había dicho que el desierto era la mejor defensa ante cualquier avance enemigo en ese sector.
Franco desprendió en secreto sus divisiones del frente occidental, dejando pequeñas fuerzas que debían desarrollar una intensa actividad para engañar al enemigo.
En forma paralela, el 22 de agosto, la 6.ª División cayó sorpresivamente sobre Algodonal aniquilando a un destacamento boliviano al mando del experimentado teniente Hugo Rene Pol que sustituía al mayor alemán Wilhelm Brandt que circunstancialmente se había ausentado horas antes del fortín.
Este regimiento envolvió a fuerzas dispersas en las cercanías de Puesto Burro y utilizando camiones prosiguió el avance hacia el oeste.
El presidente Salamanca, alarmado por la característica vertiginosa de las operaciones, viajó con urgencia al Chaco para solucionar este peligroso e inesperado avance paraguayo.