Batalla de Canusio (209 a. C.)

Formó parte del plan desarrollado durante esa campaña contra los pueblos y tribus que habían sido conquistados o habían abandonado voluntariamente la alianza con Roma y se habían unido con los cartagineses en el área del Salentino (ocurrido en la segunda mitad del consulado de 213 a. C.), norte de Lucania (durante 212 a. C.) y extremo suroccidental de la Magna Grecia (215 a. C.), y también para estrechar el cerco al líder cartaginés, Aníbal, en el sur de Italia.La batalla supuso un nuevo enfrentamiento entre Aníbal y el general romano Marco Claudio Marcelo.Como ninguno ganó decisivamente y ambos sufrieron muchas bajas (unas 14.000) el resultado de la batalla es discutido tanto por los historiadores modernos como por los antiguos.Marcelo fue nombrado procónsul, mientras Quinto Fulvio Flaco y Fabio Máximo resultaron elegidos cónsules.Para ejecutar su plan contaba con la colaboración de sus colegas que debían entretener a Aníbal mientras él iniciaba sus operaciones.Para coordinar la estrategia se entrevistó personalmente con el otro cónsul, Quinto Fulvio Flaco, y mandó una misiva a Marcelo pidiéndole endurecer al máximo las acciones contra Aníbal.El combate comenzó con mayor dureza que el día anterior y permanecía indeciso hasta que los púnicos llevaron a cabo una carga con sus elefantes que consiguió ser repelida por los romanos quienes a su vez aprovecharon el desconcierto creado por los paquidermos en sus propias filas para contraatacar con su caballería y poner en fuga a la infantería enemiga.[4]​ Al día siguiente del combate Aníbal decidió abandonar el área y dirigirse al Brucio,[5]​ no siendo seguido por Marcelo debido a la gran cantidad de heridos con que su ejército había quedado.