Sitio de Siracusa

Un ejército romano liderado por el general Marco Claudio Marcelo sitió la ciudad por tierra y por mar.

Los romanos tenían sus propios artilugios, como la sambuca, escaleras de asalto montadas sobre galeras.

Así, en 212 a. C., mientras los habitantes participaban en un festival de la diosa Artemisa, los romanos consiguieron traspasar las murallas y entrar en la ciudad.

La isla sería para los romanos un paso importante hacia el norte de África y Grecia en los próximos conflictos.

Siracusa sería una ciudad importante para el Imperio romano hasta bien entrado el siglo V jugando un doble propósito, militar y económicamente en la creación del Imperio; la retomada Siracusa se aseguró también de que los cartagineses no pudieran conseguir un equilibrio en Sicilia, lo que les podría haber llevado a Italia y Roma, en la que podrían haber abastecido a Aníbal de equipo de asedio para su campaña.