[15] Su padre decidió instalarse definitivamente en Austria, donde sus hijos se quedaron a cargo de la abuela paterna.
[18] Un consejo familiar decidió que los dos hijos mayores de Leopoldina estuvieran al cuidado de los abuelos maternos y se les educara y criara en Brasil.
[20] Tuvieron los hermanos como preceptor del colegio Pedro II a Manuel Pacheco da Silva, (futuro barón de Pacheco[21]), y se pasaban los días cazando y estudiando a los clásicos franceses, retórica, historia, geografía, idiomas y música.
[23] Debido a su expediente brillante, Augusto se forma como guardiamarina en 1886.
[24] Los telegramas del almirante Wandenkolk, ahora ministro de Marina del gobierno provisional, obligaron al comandante del crucero a sustituir las insignias imperiales de las banderas y a persuadir a Augusto de que dimitiera.
[24] Tras consultar a su abuelo y a su tío, el conde de Eu, el príncipe decide no dimitir, sino solicitar un permiso de dos meses.
[24] Por telegrama, el ministro responde a la petición: Augusto desembarcó en Colombo, Ceilán, donde la tripulación le ofreció una cena de despedida.
En 1897, a bordo del acorazado guardacostas Wien visitó Portugal, donde fue recibido por el rey Carlos I, e Inglaterra, donde fue recibido varias veces por la reina Victoria.
[31] Estuvo preparándose para volver al país con toda la familia para la celebración del centenario de la independencia de Brasil en 1922, pero cayó muy enfermo y no pudo realizar el ansiado viaje.