Dax

El lema de la ciudad, Regia Semper (siempre real), se corresponde con una ciudad libre, que tan solo reconoce la autoridad del rey y no se ha encontrado sometida a ningún poder feudal.

Su paisaje es variado: desde las orillas del Adur hasta las colinas que, hacia el sur, se acercan al Bearn y a la Baja Navarra.

Fue creada ex novo en época del emperador Augusto, entre los años 16 - 13 aC, en el lugar donde emergen las fuentes de aguas termales, recurso natural muy apreciado por los romanos por su calor natural y sus propiedades terapéuticas.

En esta reorganización, los Tarbelli (Tarbelos), el pueblo aquitano que habitaba la zona de la futura Aquae Tarbellicae quedaron configurados como una nueva civitas romana, cuyo centro jurídico-administrativo se estableció en la nueva fundación romana de Aquae Tarbellicae.

Debido a la situación geográfica de Dax, rápidamente se convirtió en un importante centro comercial.

Ese mismo año contrajo matrimonio con Enrique Plantagenet (más tarde rey de Inglaterra como Enrique II), conde de Anjou, Maine y Turena, aportando como dote Aquitania, Guyena y Gascuña.

A la prosperidad económica de la ciudad contribuía igualmente su ubicación a orillas del Adur, en las cercanías de Bayona, y la antigua vía comercial que desde Dax, cruzando los Pirineos, se dirigía hacia Pamplona.

Durante el siglo XVII, como lo prueban diversas construcciones civiles de la ciudad, ésta conoce un cierto despegue económico.

La creación de los departamentos en Francia como nueva estructura administrativa y política supuso una oportunidad perdida para Dax.

Sin embargo, en 1790 la decisión que tomó la Asamblea Nacional francesa fue la de otorgar la capitalidad del mismo a Mont-de-Marsan, en detrimento de Dax, siendo que la elegida era por entonces una modesta localidad en el este del nuevo departamento.

El termalismo, que había ido entrando lentamente en declive en los siglos anteriores, conoció un nuevo período de auge durante el Segundo Imperio Francés y especialmente a raíz de la construcción del ferrocarril París-Burdeos-Dax-Irún, que convirtió a la ciudad en un importante nudo ferroviario, con la construcción de un ramal Dax-Tarbes.

Por esos motivos hay una gran abundancia de establecimientos dedicados a la restauración o la hotelería.

Dax recibe además unos 55.000 turistas al año relacionados con el termalismo, lo que convierte a la ciudad en la primera estación termal de Francia, por delante de Vichy o Vittel.

Sin embargo, el sector secundario, la industria, está igualmente presente, atraída especialmente por la facilidad de las comunicaciones de Dax con ferrocarril convencional, Train à Grande Vitesse, carretera y autopista.

Fachada de la catedral de Dax .
Fontaine Chaude