Qin Shi Huang

[12]​[13]​ Si hubiera recibido un nombre póstumo después de su muerte, al igual que su padre, habría sido conocido por los historiadores como Rey NN.La palabra di también se refería al dios supremo en los cielos, creador del mundo.Por lo tanto, uniendo estas dos palabras, algo que nadie había hecho antes, Qin Shi Huang creó un título a la par con su característica de unir el al parecer infinito territorio de los reinos chinos, uniendo de hecho el mundo (los antiguos chinos, al igual que los antiguos romanos, creían que su imperio comprendía el mundo casi en su totalidad).Sin embargo, su régimen se derrumbó poco después de su muerte y China fue asediada por una guerra civil.Más tarde, en el 202 a. C., la dinastía Han se las arregló para unificar China nuevamente.Sin embargo, la historia es dudosa ya que los confucianos habrían encontrado más fácil denunciar a un gobernante cuyo nacimiento fuera ilegítimo.Lo que hicieron fue dividir el imperio en 36 provincias dirigidas cada una por tres gobernadores, uno civil, otro militar, y un último para mediar entre estos dos.El gobernador civil era reasignado a una nueva provincia cada pocos años para prevenir que acumulara una base de poder.Se cree que murió tras haber ingerido una mezcla de jade y mercurio recetada por los alquimistas de la Dinastía Qin (causándole un fallo hepático y muerte cerebral), pócima que pretendía darle su ansiada inmortalidad.Llevaría dos meses al gobierno alcanzar la capital y no sería posible detener el levantamiento.La idea tras esto era evitar que la gente percibiera el nauseabundo olor proveniente de la diligencia del emperador, donde su cuerpo se estaba empezando a descomponer severamente.Qin Er Shi no fue ni de lejos tan capaz como lo fue su padre.En la historiografía china tradicional, casi siempre se retrataba al primer Emperador como un tirano brutal, supersticioso (resultado de su interés en la inmortalidad y en su obsesión por su posible asesinato) y de vez en cuando como un gobernante mediocre.Casi todas estas han sido desacreditadas por los modernos sinologistas como habladurías y leyendas.Otro historiador, Ma Feibai (馬非百), publicó en 1941 una biografía completamente revisionista del Primer Emperador titulada Qin Shi Huangdi Zhuan (秦始皇帝傳).Sin embargo, desde 1972, se ha dado preeminencia a una visión oficial radicalmente diferente de Qin Shi Huang.Esta nueva apreciación fue lanzada por la biografía Qin Shi Huang de Hong Shidi.En esta nueva era, se ve a Qin Shi Huang como un gobernante con visión de futuro que destruyó las fuerzas secesionistas y estableció el primer estado chino unificado y centralizado mediante el rechazo del pasado.Atributos personales, como su búsqueda de la inmortalidad, tan enfatizados en la historiografía tradicional, apenas se mencionaban.Las nuevas versiones describían como, en su tiempo (una era de gran cambio político y social), no tuvo escrúpulos en usar métodos violentos para machacar a los contrarrevolucionarios, tal como canciller "industrial y comerciante propietario de esclavos" Lu Buwei.Desafortunadamente, no fue tan minucioso como debía haber sido y después de su muerte, subversivos ocultos, bajo el liderazgo del jefe eunuco Zhao Gao, tomaron posesión del poder y lo usaron para restaurar el viejo orden feudal.En 2006, se publicó la primera biografía en castellano sobre Qin Shi Huang, titulada "El primer emperador", escrita por José Ángel Martos y editada por Aguilar.Esta gente nunca regresó, y el mito clama que se asentaron en una de las islas japonesas.Sin embargo, estas salidas proporcionaban grandes oportunidades a los asesinos, el más famoso de los cuales fue Zhang Liang.También contrató a varios sosias para hacer menos claro qué persona era el emperador.
Viajes imperiales de Qin Shi Huang.
Algunos de los 8000 guerreros de terracota que custodian el mausoleo del emperador.
La expedición de Xu Fu que en 219 a. C. partió en busca del elixir de la vida por orden de Qin Shi Huang. Pintura japonesa del siglo XIX .