Durante los siglos XIX y XX, las sustancias húmicas a menudo se los caracterizaba, teniendo como base la teoría ácido-base, que describía los ácidos húmicos (AH) como ácidos orgánicos y sus bases conjugadas, los humatos, como componentes importantes de la materia orgánica.
Desde este punto de vista, los ácidos húmicos se definieron como sustancias orgánicas extraídas del suelo que coagulan (forman pequeños trozos sólidos) cuando se acidifica un extracto de base fuerte, mientras que los ácidos fúlvicos (AF) son ácidos orgánicos que permanecen solubles (permanecen disueltos) cuando se acidifica un extracto de base fuerte.
Otros proponen no basarse en la extracción alcalina y analizar directamente el suelo, pero su complejidad impide una adopción generalizada en la agricultura.
[7] En la práctica, esto significa que algunas fuentes pueden aplicar un análisis ácido-base tradicional al compost y luego expresar los resultados en términos de "sustancias húmicas".
El ácido húmico usado para enmendar el suelo se fabrica usando estos mismos procedimientos bien establecidos.
[16] Como suplemento nutricional, el ácido fúlvico se puede encontrar en forma líquida como componente de los coloides minerales.
[11] Desde los albores de la química moderna, las sustancias húmicas se encuentran entre las más estudiadas entre los materiales naturales.
La opinión tradicional es que las sustancias húmicas son heteropolicondensados, en diversas asociaciones con arcilla.
Al igual que la arcilla, el carbón vegetal y el humus coloidal contienen nutrientes catiónicos.
Como muchas moléculas bioorgánicas diferentes en asociaciones físicas muy diversas se mezclan en ambientes naturales, es engorroso medir sus concentraciones exactas en la superestructura húmica.
Los extractos húmicos están compuestos por un gran número de diferentes moléculas bioorgánicas que aún no han sido totalmente separadas e identificadas.
Los agricultores siempre han intuido que las enmiendas del suelo con materia orgánica son beneficiosas para el crecimiento de las plantas.
[35] El lignosulfonato de la reducción a pulpa por sulfito se puede hacer para imitar el humus por hidrólisis y oxidación.
[38] En geología económica, el término humato se refiere a materiales geológicos, como lechos de carbón erosionados (leonardita), rocas de barro o material poroso en areniscas, que son ricos en ácidos húmicos.
[41] La arqueología encuentra que el antiguo Egipto usaba adobes reforzados con paja y ácidos húmicos.