Los mongoles habían puesto bajo asedio la ciudad de Otrar, pero al ver la dura defensa, el jagán decidió avanzar sobre Transoxiana junto con su hijo menor Tolui.
[8] Luego tenían la zona intramuros (shahristán) donde vivía la mayoría de la población y se encontraban las principales edificaciones.
[9] Por último, tenían los arrabales o suburbios (rabad) que se encontraban afuera de las murallas.
[16] Según el demógrafo Tertius Chandler, la urbe tenía unos 60 000 pobladores en 1150[17] y se mantuvo en esos niveles hasta el año 1200, con 60 000[18] ú 80 000[19] habitantes.
Según R. W. Bulliet, Isfahán, Ray, Nishapur, Merv, Bujará, Samarcanda, Balj y posiblemente otras urbes superaban los cien mil habitantes.
En respuesta, el jagán Gengis Jan y su hijo menor Tolui cruzaron el desierto del Kyzyl Kum hacia Bujará.
[28] Aunque los cronistas medievales han atribuido enormes fuerzas a ambos bandos, los historiadores modernos son más conservadores en sus estimaciones, pero las cifras precisas siguen siendo ampliamente discutidas; la única certeza es que la fuerza mongol total era mayor que el ejército del sah.
[29] El erudito afgano Ali Ahmad Jalali estimaba en 50 000 plazas al ejército que Gengis Jan y Tolui llevaron a las puertas de Samarcanda,[2] mientras que el sueco Carl Fredrick Sverdrup reduce el número a 40 000.
[36] En cambio, el árabe Ali ibn al-Athir hablaba de que el sah dispuso a 50 000 jinetes para proteger Samarcanda.
Los mongoles liberaron a los elefantes capturados en la campiña cercana, donde murieron poco después por la falta de alimentos.
[41] Los paquidermos fueron exhibidos por las autoridades sobrevivientes, quienes afirmaron que servían para romper las líneas de infantería, pero los mongoles no se impresionaron.
[4] Samarcanda siguió arruinada hasta que Tamerlán la convirtió en su capital en 1370, reconstruyendo sus mezquitas, palacios, jardines, pabellones y murallas[56] en la parte oeste del nuevo emplazamiento.