Francisco Javier Sáenz de Oiza
Su padre era arquitecto del Catastro en Sevilla y debido a la pandemia de gripe de 1918 los médicos recomendaron a su madre embarazada que se fuera al pueblo.No participó en la guerra y al terminar la contienda hizo las milicias universitarias.Tomó inspiración de arquitectos como Frank Lloyd Wright, Mies van der Rohe, Eero Saarinen, Jorn Utzon, Louis Kahn[4] y Le Corbusier.[3] Tuvo siete hijos, de los que cuatro son arquitectos, Javier, Marisa, Noemi y Vicente.Dormía 6 horas y pasaba tanto tiempo junto al flexo de su mesa de trabajo que se le llegó a formar una mancha en la frente por el calor del flexo.