Torres Blancas

El proyecto, firmado por Francisco Javier Sáenz de Oiza como arquitecto y la participación de ingenieros como Leonardo Fernández Troyano y Carlos Fernández Casado, es de 1961, y las obras se prolongaron desde 1964 hasta 1968.[4]​ El edificio fue un experimento propiciado por un cliente, Juan Huarte Beaumont (propietario de la constructora del mismo nombre, Huarte), que se significó en los años 1960 por su apoyo a la vanguardia española, construyendo algunos de los mejores edificios de España en los años 1960 y 1970.[5]​ Corresponde a la llamada etapa orgánica de la arquitectura madrileña con marcada tendencia neoexpresionista y sugerencias surrealistas, todo ello sumado a su carácter experimental.[1]​ Blancas se debe a una pequeña artimañana del arquitecto en las presentaciones previas para intentar que el proyecto obtuviera la licencia a pesar de lo arriesgado del mismo.Son las paredes externas y la estructura vertical interna los elementos que garantizan las funciones de sustentación.