Las tecnologías RFID se agrupan dentro de las denominadas Auto ID (automatic identification, o identificación automática).
En 2005 PolyIC y Philips presentaron etiquetas sencillas en el rango de 13.56 MHz que utilizaban esta tecnología.
Estas son mucho más fiables (tienen menos errores) que las pasivas debido a su capacidad de establecer sesiones con el lector.
Otros sensores asociados con RFID incluyen humedad, vibración, luz, radiación, temperatura y componentes atmosféricos como el etileno.
Las etiquetas sin batería deben responder reflejando energía de la portadora del lector al vuelo.
Es interesante comparar sistemas más tradicionales como códigos de barras frente a la alternativa que presentan las etiquetas RFID.
En cuanto al coste, los códigos de barras pueden ser impresos con sistemas sencillos y por ello no resultan gravosos, pero sí es cierto que son más proclives al deterioro en ambientes agresivos y no se pueden modificar una vez han sido impresos.
La información de las etiquetas RFID no están grabadas a fuego: puede reescribirse siempre que sea necesario modificar algún dato.
Finalmente, respecto al coste se trata de un sistema menos económico puesto que implica un desarrollo tecnológico mayor.
Se pueden utilizar dipolos plegados o bucles cortos como estructuras inductivas complementarias para mejorar la alimentación.
Se han probado tintas conductoras en algunas antenas encontrando problemas con la adhesión al circuito integrado y la estabilidad del entorno.
No obstante, puede haber casos en los que se fija la distancia entre ambas partes así como la potencia efectiva emitida.
Estas se hacen pasar por etiquetas normales pero poseen ciertas características específicas; en concreto, pueden tomar cualquier código de identificación como propio, y pueden responder a toda pregunta que escuchen, asegurando el entorno al anular la utilidad de estas preguntas.
En general, puede emitirse una señal espuria si se detecta actividad de etiquetas para bloquear las transmisiones débiles producidas por estas.
Puede obtener más información sobre las recomendaciones de este organismo en relación con los sistemas RFID en su reporte al respecto.
El estándar UHF estadounidense (908-928 MHz) no es aceptado en Francia e Italia ya que interfiere con sus bandas militares.
Por ejemplo, en Europa, la regulación Waste Electrical and Electronic Equipment (Equipos eléctricos y electrónicos inútiles), no permite que se desechen las etiquetas RFID.
En ocasiones se insertan en pequeños chips en mascotas, para que puedan ser devueltas a su dueño en caso de pérdida.
[18] Sensores como los sísmicos pueden ser leídos empleando transmisores-receptores RFID, simplificando enormemente la recolección de datos remotos.
En enero de 2003, Michelin anunció que había comenzado a probar transmisores-receptores RFID insertados en neumáticos.
Su principal objetivo es el seguimiento de neumáticos en cumplimiento con la United States Transportation, Recall, Enhancement, Accountability and Documentation Act (TREAD).
Dado que las etiquetas RFID no necesitan un lector óptico, no es necesario abrir la cubierta de un libro o la caja del DVD para escanear el elemento, es por esto que se puede leer una pila de libros al mismo tiempo.
Lo ideal es el correcto insertado en las prendas, pues la posición es muy importante ya que de situarse en determinadas zonas, puede dar error en la lectura.
Un buen socio tecnológico en este campo es importante que sea capaz de dimensionar perfectamente el sistema.
[23] En caso de la ropa plana, su uso está altamente condicionado a la etiqueta seleccionada, siendo la parte más importante para asegurar el funcionamiento correcto en dichas prendas.
Si su uso es requerido en esta ropa, la etiqueta encapsulada en epoxi, es la más recomendable, ya que otras soluciones de etiqueta plana de algodón o plástico, se acaba rompiendo o fundiendo, con el consiguiente perjuicio para el proyecto.
Desde enero de 2005, Walmart puso como requisito a sus 100 principales proveedores que apliquen etiquetas RFID en todos sus envíos.
Combinado con los sensores para supervisar diversas funciones del cuerpo, el dispositivo Digital Angel podría proporcionar supervisión de los pacientes.
Eventos como CES en Las Vegas, NV y otros han atraído mucho la atención a posibles nuevas industrias.
Los pasaportes con RFID integrado únicamente identifican a su portador, y en la propuesta que se está considerando, también incluirían otros datos personales.