El control de acceso consiste en la verificación de si una entidad (una persona, vehículo, ordenador, etc.) solicitando acceso a un recurso tiene los derechos necesarios para hacerlo.
[3] Las peticiones de acceso son realizada por lo que se llama un principal, el cual puede ser: un usuario (humano), un sujeto (un proceso que se ejecuta en nombre de un usuario) y un objeto (un dato o un recurso)[3] Podemos clasificar la políticas de control de acceso en distintos tipos, cada una con sus ventajas y con sus inconvenientes:[3][4] El control de acceso generalmente incluye tres componentes o técnicas: Hoy en día,[¿cuándo?]
cada vez hay más demanda por parte de las empresas para poder rastrear el acceso a sus ordenadores usando una notificación de derechos de acceso.
[cita requerida] Según la EPA del segundo trimestre de 2018, “en España se realizaron 6.822.900 horas extraordinarias a la semana y que no fueron retribuidas 2.986.200 horas, es decir un 43,8 % del total”.
[7] Para luchar contra los excesos de jornadas y horas extraordinarias no pagadas ni compensadas, el Gobierno obligará a las empresas a controlar los accesos de sus empleados y registrar las horas trabajadas siguiendo su “Plan Director por un trabajo digno (2018 / 2019 / 2020)”.