En ocasiones, se depositaban en las tumbas maquetas de los mismos para que sus moradores pudieran disfrutarlos en el más allá.[1] Estos jardines, simétricos y rígidos, dan una idea de la civilización egipcia.Inicialmente, esta se sacaba del río mediante cubos de cuero y era llevada en hombros hasta los jardines.Más tarde, aproximadamente a partir del siglo IV a. C., el agua se elevaba desde pozos mediante montacargas con contrapesos llamados shadouf en árabe.Los jardines de los templos se empleaban para cultivar determinadas plantas usadas en sus ceremonias.Bajo sus mandatos se diseñaron enormes paseos adornados con plantas, hierbas y árboles frutales traídos de todas las regiones limítrofes.A principios del Imperio Nuevo, los jardines particulares u ornamentales se convirtieron en una característica común de las residencias lujosas.Los primeros jardines individuales son, sin duda alguna, las construcciones privadas de los oasis artificiales.Su lecho terminaba en pendiente y una escalera lateral permitía que los jardineros pudieran recoger agua para el riego.El Templo de Amón en Karnak tuvo veintiséis huertos, junto con un primitivo jardín botánico, el cual albergaba, según una inscripción, "todo tipo de hermosas flores y plantas exóticas encontradas en las divinas tierras que Su Majestad ha conquistado.Las hileras de árboles a menudo se extendían varios kilómetros conectando diversos templos entre sí.Se creía que esta diosa llevaba agua a los muertos, saciando su sed.Las flores formaban parte de las ceremonias religiosas durante el culto al dios Amón.Normalmente consistían en una pequeña casa cuadrada o pabellón con columnas de madera, rodeados por un muro.Otros frutos que se plantaban en los jardines eran la azufaifa, la aceituna y el melocotón.A veces el estanque tenía forma de T, con un ramal conectado al río o a un canal, como en el jardín del Templo de Hatshepsut en Deir el-Bahari.En su interior se criaban peces destinados al consumo o a la decoración del mismo.[11] Más tarde, durante la ocupación persa, se introdujo el loto rosa en Egipto.La sombra era un importante atractivo del jardín, proporcionada por los árboles y por las parras de uva suspendidas entre columnas.