Edición de libros

La edición del libro puede o no incluir la actividad de poner en circulación la información disponible al público en general, es decir, la distribución.En la cultura anglosajona sí existe una clara diferencia entre edición (editing) y publicación (publishing).Una obra divulgada previamente en formato de libro puede volver a editarse si así se desea.Estrictamente hablando, si se vuelve a imprimir o divulgar esa obra sin cambios, se denomina reimpresión; si, por el contrario, sufre algún tipo de modificación sustancial, como ampliaciones, revisiones, correcciones, supresiones, añadidos u otra modificación cualquiera, se denomina nueva edición o reedición, agregando el número oportuno (primera, segunda, tercera edición).Para ello, se tienen en cuenta criterios como los siguientes: Esta parte culmina cuando la comisión acepta o rechaza la publicación del libro.En este proceso se conforman las páginas maestras (layouts) a partir de una retícula predeterminada.Es el proceso que forma parte del periodo de preimpresión, es decir, antes de imprimir la tirada, en donde se le dará forma gráfica final al texto y a las imágenes que conforman la obra.[6]​ Se considera que la obra ha pasado a dominio público cuando los derechos patrimoniales han expirado.Esto ocurre habitualmente cuando ha transcurrido un plazo establecido por la ley (que, según el Convenio, no debe ser menor a 50 años) desde el fallecimiento del autor, lo que se conoce como post mortem autoris.[7]​ Es frecuente la circulación de obras traducidas; al respecto, numerosos traductores literarios se han destacado.Por ejemplo, en el caso de las editoriales especializadas en libros académicos o técnicos, los editores suelen iniciar un proceso de selección leyendo propuestas por autores que, por su parte, pueden o no tener el original ya escrito.También es muy común que sea el editor quien presente la iniciativa a un autor de escribir una idea; estos se llaman originales a pedido y se consideran libros de proyecto editorial.Luego toma tareas relativas al editing, siempre teniendo en cuenta una mirada que exceda su trabajo, pues debe ser capaz de considerar el libro en el catálogo, manteniendo un diálogo activo con otras áreas de la editorial.No se trata de una opinión injustificada ni subjetiva, por el contrario, un lector profesional debe tener en cuenta cosas como el perfil del catálogo editorial, las características del género, la coherencia y cohesión, entre otras.Deciden la disposición visual del texto, las imágenes y otros paratextos, así como el tamaño de la topografía, interlineado, etc.[14]​ La impresión es un proceso para la producción de textos e imágenes, típicamente con tinta sobre papel usando una prensa rotativa.Las encuadernaciones tienen por objeto procurar al libro tres ventajas: su conservación, su fácil manejo y su presentación artística.Existen diferentes tipos de encuadernación: Una vez impreso el libro, revista o periódico se pone en marcha su distribución y venta.La distribución puede ser realizada por una empresa subcontratada con logística propia en transporte o por la misma editorial.Estos primeros ejemplares eran muy reducidos y debido a ello muchos libreros se convirtieron también en impresores.En varios países se dictan cursos y carreras sobre el oficio editorial con la idea de profesionalizar la actividad.Diversas entidades imparten cursos y diplomados, como la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM), mediante los cuales se fomenta la profesionalización en este ámbito.Fue creada en el año 1991 por la firma de un convenio entre la facultad y la Cámara Argentina del Libro.
Muestra de corrección de galeradas (en el proceso de corrección del texto ).
Libros antiguos.
Rejilla base
Rejilla base utilizada en la maquetación de libros, revistas y periódicos.
Dispositivo de impresión directamente a la placa de la casa AGFA. Usa un láser violeta para la generación de la placa litográfica.
Libros de ciencia ficción ya terminados en los estantes de una librería en Polonia.