Huétor Tájar

Sobre esta base agrícola se asienta una importante industria agroalimentaria en torno a la conserva del espárrago y otros productos como la alcachofa.

Sin embargo los abundantes hallazgos en municipios limítrofes como Villanueva (Yacimiento del Cortijo de Villasol), Montefrío (Peñas de los Gitanos), Loja (Las terrazas del Genil en Loja) y otros, permiten suponer que en Huétor también pudo existir un poblamiento humano ya desde tiempos prehistóricos.

[b]​ La Edad Antigua en el municipio está mejor documentada gracias a los yacimientos estudiados del Cerro de los Castellones,[5]​[6]​ La Vega de Don Antonio[7]​ (en el límite con Loja) y Los Villares,[7]​ que atestiguan la presencia ininterrumpida íbera, fenicia y romana.

[9]​ En el yacimiento del cerro de la Verdeja se han producido hallazgos arqueológicos que documentan su población entre los siglos VI y IX.

[13]​ Por su parte, Tájara aparece bien documentada en los textos del sigo XI de al-Udri, aunque es bastante probable que ya existiera en época califal.

Esta hipótesis toma cuerpo atendiendo al probable origen bereber del topónimo Taŷatat y por tanto ligado a los primeros ocupadores de la península.

El territorio conquistado pasó a manos del monarca, que lo dividió en lotes de tierras y los repartió entre los nobles participantes en la guerra.

Incluso una vez suprimido el señorío, perduraron estos gravámenes ya que se consideró al censo como institución civil y no señorial.

Por último, los contenidos en potasio son bastante importantes e influyen favorablemente sobre la calidad del cultivo además de retrasar el espigado.

Las heladas son posibles desde noviembre hasta finales de abril, constituyendo un fenómeno bastante normal en el valle.

Por otra parte, es importante señalar que las lluvias de origen torrencial suponen en torno a un 20 % del total anual.

El régimen fluvial es típico mediterráneo, con un estío en verano y fuertes crecidas en invierno, que pueden incluso llegar a ser catastróficas.

El crecimiento vegetativo aumentó durante este período y sólo la epidemia del cólera de 1885 provocó un descenso en la población.

Atendiendo a la evolución de la natalidad y mortalidad en los últimos años,[35]​ y por tanto del crecimiento vegetativo, se observa que claramente Huétor Tájar ha llegado a un régimen demográfico moderno, típico de las zonas desarrolladas.

Destacar la presencia de numerosos comercios regentados por esta población aglutinados en torno a este colectivo (esencialmente locutorios).

En la actualidad se está proyectado la construcción de un nuevo puente sobre el río Genil que va a agilizar los accesos y salidas del municipio.

En cuanto a las infraestructuras viarias, Huétor Tájar se encuentra en el p.k.203 de la A-92, por lo que está comunicada con las 8 capitales provinciales.

Los profesionales integrados en esta unidad son once médicos de familia, dos pediatras, siete enfermeras y dos auxiliares de enfermería, a los que este año se han incorporado un fisioterapeuta, una matrona, una trabajadora social y tres auxiliares administrativos.

La distribución de los empleados en los tres grandes sectores es bastante peculiar, ya que la agricultura tiene aún un enorme peso (29,41 %) sobre el total.

El sector terciario está en la actualidad en plana expansión absorbiendo en muchas ocasiones a mano de obra inmigrante.

Otros cultivos de regadío que se dan son las hortalizas, tales como, patatas, sandías, melones, tomates, cebollas, ajos, etc.

En cuanto al secano, el principal cultivo es el olivar, dedicándose una escasa superficie a otros, como cereales.

Por último, hay que señalar que el envejecimiento de los agricultores no es tan acuciante como en otros espacios agrarios como el granadino, favorecido por la tradición agrícola y la apreciable rentabilidad de los cultivos hortícolas desarrollados en la rica vega panciverde.

En los años sesenta, hubo un atisbo de asociacionismo en la comercialización del espárrago llegando a mercados más lejanos como Madrid o Barcelona.

Tras estos duros inicios, se constituyeron hacia mediados de los setenta las primeras sociedades cooperativas, mejorándose la producción y comercialización del espárrago.

El éxito del cooperativismo propulsó este fenómeno y se llegaron a fundar otras 4 cooperativas en los años ochenta.

Por otra parte el sector ocio está teniendo un gran desarrollo, aunque el turismo aún es muy incipiente.

En esta fecha es típico el hornazo, que es fundamentalmente un bollo de aceite con un huevo duro en el centro.

En Huétor Tájar hay buena cocina, pero sin duda el espárrago, que ha pasado de mero complemento al ser todo el leitmotiv coquinario, es su aspecto más importante.

La práctica del deporte en el municipio está muy generalizada gracias a la existencia de instalaciones polideportivas que la facilitan.

Denario de plata encontrado en Huétor Tájar. [ c ]
Estatua de don Álvaro de Luna en Cañete (Cuenca) , que destruyó las alquerías de Huétor y Tájara en 1431.
Blasón de la Casa de Fuentidueña , señores de Huétor Tájar.
Blasón de la Casa de Portocarrero , señores de Huétor Tájar.
Eugenia de Montijo , señora de Huétor Tájar y emperatriz de Francia. Da nombre al Caz Emperatriz Eugenia y a la comunidad de regantes homónima.
Hidrografía y Relieve de Huétor Tájar.
Diagrama Ombrotérmico de Huétor Tájar. Fuente: Elaboración propia a partir de datos del INM.
Río Genil a su paso por la localidad de Huétor Tájar.
Evolución de la población en Huétor Tájar.
Fuente: IEA .
Evolución del crecimiento natural o vegetativo en Huétor Tájar.
Fuente: IEA .
Pirámide de población de Huétor Tájar
Fuente: IEA .
CEIP Padre Manjón de Huétor Tájar.
Casa de la Cultura en Huétor Tájar.
Usos y aprovechamientos del suelo en Huétor Tájar.
Espárrago de variedad verde-morada con Denominación de Origen de Huétor Tájar.
Centro Comercial Abierto de Huétor Tájar.
Vista del Torreón de Huétor .
Iglesia de Santa Isabel
Paseo de la Acequia Gorda con vistas a la vega.
Vista del Parque de los Patos .