[4] En este manifiesto defiende el xenofeminismo, revisando los proyectos políticos feministas y haciendo una apuesta por el uso estratégico de las tecnologías existentes para rediseñar por completo el mundo.
La autora subrayará los principales fundamentos teóricos del manifiesto: antinaturalismo, tecnomaterialismo y el abolicionismo de género.
Así pues, es necesario disponer de una organización social colectiva a gran escala para poder adquirir vínculos patrióticos.
[7] Con este trabajo Hester amplía el anterior manifiesto y lo articula alrededor del aceleracionismo.
Según ella, la realidad actual vive un proceso rápido en todos sus ámbitos, especialmente en la ciencia y la tecnología.
[11] Junto al economista Nick Srnicek, inició la segunda ola de marxismo postautonomista[12] y feminismo materialista, publicando el texto "Después del trabajo: ¿qué nos queda?"
Las crisis del trabajo con sus empleos precarios, subcontratación y automatización adquiere una nueva dimensión cuando el trabajo se realiza a través de la lente del cuidado y da a los problemas laborales una perspectiva totalmente nueva.