Algunas referencias hablan de una comida elaborada con agua, especias, miel, huevos y harina llamada phyllon.
Aunque el más parecido a la filloa sea probablemente la crêpe de la Bretaña francesa, hay importantes diferencias.
En Galicia, Asturias y León son tantos sus nombres como las pequeñas variantes en su receta.
En algunas zonas de la Costa de la Muerte se le denomina fullado,[2] en otras feixó o fisuelu (en Laciana se denomina feixolada a un dulce semejante a la leche frita), y en Baiona, marrucho.
El elemento común a todas las formas de elaboración es el untado del recipiente con tocino cada pocas filloas.