Luego de su traslado a Recife, pasó a ocupar una vieja casona en la rúa do Hospicio, poco adecuado para sus funciones y, por eso, apodado por los estudiantes como el "pardieiro" (en español: "paraíso").
La institución vivió tiempos gloriosos durante el Segundo Reinado bajo la influencia de diferentes juristas como Clóvis Beviláqua, Braz Florentino, José Soriano de Souza, Silvio Romero, Tobias Barreto, Joaquim Nabuco, Castro Alves y muchos otros.
En esta época, la facultad estaba marcada por un fuerte pluralismo teórico.
El movimiento se hizo famoso por la intensa crítica al clericalismo y al neoescolasticismo vigente en los estudios jurídicos de esa época, así como a la introducción de doctrinas alemanas en el pensamiento nacional, por la divulgación de autores germanos hasta entonces inéditos en la vida intelectual brasileña como Rudolf von Ihering.
Por un lado, el movimiento de los bachilleres revelaba inconformismo con relación a las teorías racionalistas metafísicas y la doctrina del derecho natural.
[13] La FDR posee una gran biblioteca con más de cien mil volúmenes, muchos de ellos raros y preciosos (como la primera edición de la Prosopopeia, de Bento Teixeira), abarcando las áreas del derecho, filosofía, historia y literatura, teniendo bajo su custodia, inclusive, la biblioteca que perteneció a Tobias Barreto.
Muchos de sus profesores se hicieron famosos por su oratoria, conocimientos jurídicos y cultura general.
Se trata de la revista académica más antigua del país.
Ya en la prueba 2010.1 la institución tuvo 81.3% de aprobación quedando en segundo lugar del ranking nacional.
Actualmente, con excepción de la Unifor, ninguna otra universidad del nordeste tiene una nota superior a 5.
También se consagró subcampeón en la Competición Potiguar de Proceso Penal del 2021.