El tiempo atmosférico o meteorológico o temperie[1] es el estado de la atmósfera en un momento y lugar determinados[2][3] definido por diversas variables meteorológicas[4] como la temperatura, la presión, el viento, la radiación solar, la humedad y la precipitación.Estas diferencias pueden ocurrir debido al ángulo del sol en cualquier sitio particular, el cual varía por latitud desde los trópicos.Debido a que el eje de la Tierra está inclinado en relación con su plano orbital, la luz solar incide en ángulos diferentes en los distintos meses del año.Un lugar famoso en el sistema solar, es la Gran Mancha Roja de Júpiter, es una tormenta anticiclónica que existe desde al menos 300 años.La corona de una estrella se pierde constantemente en el espacio, creando lo que esencialmente es una muy delgada atmósfera a través del sistema solar.Pero los rayos solares no calientan directamente al aire atmosférico por la propiedad del aire en su conjunto de la diatermancia que explica que la atmósfera se deja atravesar por los rayos solares sin prácticamente calentarse.Así el calentamiento de la atmósfera por la radiación solar es indirecto: los rayos solares calientan primero la litósfera (de manera rápida) y la hidrósfera (más lentamente que la litosfera).Cuando tanto la litósfera como la hidrósfera se han calentado, van cediendo ese calor a la atmósfera, la primera rápidamente y la segunda más lentamente, todo ello de acuerdo a lo explicado sobre el calentamiento de la litosfera y la hidrosfera en el artículo ya citado (diatermancia).En junio, el hemisferio norte está inclinado hacia el sol, por lo que en cualquier latitud del hemisferio norte la luz solar cae más directamente en ese lugar que en diciembre.Las estaciones meteorológicas miden las distintas variables locales del tiempo como la temperatura, la presión atmosférica, la, humedad, la nubosidad, el viento y el monto pluviométrico de las lluvias o precipitaciones.Los países cuentan con un Servicio Meteorológico Nacional que generalmente produce un informe anual de muertes, lesiones y costos totales de daños que incluyen cultivos y propiedades.[18] El tiempo ha jugado un papel importante y, a veces, directo en la historia de la humanidad.Durante el período denominado como la fluctuación Grindelwald (1560-1630), sucesos derivados de actividades volcánicas[22] parece que produjeron fenómenos meterorológicos extremos.Finlandia sufrió una hambruna severa en 1696-1697, durante la cual murió aproximadamente un tercio de la población finlandesa.La misión Cassini-Huygens a Titán descubrió nubes formadas a partir de metano o etano que depositan lluvia compuesta de metano líquido y otros compuestos orgánicos.[35] Uno de los hitos más famosos del Sistema Solar, la Gran Mancha Roja de Júpiter, es una tormenta anticiclónica que se sabe que ha existido durante al menos 300 años.
Una imagen de satélite de la NASA de la desembocadura del Amazonas nos muestra algunos de los flujos de energía en la atmósfera: los rayos solares calientan la superficie terrestre, las tierras en primer lugar (con mayor rapidez) y las aguas después (más lentamente). El calentamiento de las tierras calienta a su vez el aire superficial, que se eleva, enfriándose y condensándose la humedad atmosférica que se convierte en agua líquida que forma las nubes. Mientras tanto, el agua de los grandes ríos amazónicos está absorbiendo la radiación solar más lentamente por lo que no hay evaporación de sus aguas y, por lo tanto, tampoco hay calentamiento del aire en esas áreas, no hay convección ni condensación en ellas.
Erupción del Volcán Mayón en la isla de
Luzón
,
Filipinas
, en 1984. Puede verse a la izquierda una nube formada por vapor de agua muy caliente de la erupción al enfriarse con la temperatura ambiente.
Fuente hidrotermal submarina, cuya energía produce el ambiente que posibilita la existencia de
fauna abisal
en sus alrededores a pesar de la enorme presión que existe por la gran profundidad del fondo oceánico.
Huracán Luis en 1995.
Nueva Orleans, Luisiana, luego de haber sido alcanzada por el huracán Katrina. Katrina fue un
huracán categoría 3
cuando alcanzó tierra firme si bien fue un huracán categoría 5 mientras se desplazaba por el
Golfo de México
.
La Gran Mancha Roja de Júpiter en febrero de 1979, fotografiada por la nave no tripulada de la
NASA
Voyager 1
.