Satélite meteorológico

Los satélites pueden seguir una órbita polar, cubriendo la Tierra entera asincrónicamente, o geoestacionaria, permaneciendo sobre un mismo punto en el ecuador del planeta.

La observación pasiva (solo se recibe radiación propia de los objetos, no son satélites activos emisores de radiación, como los radáricos) es típicamente hecho vía diferentes 'canales' del espectro electromagnético, en particular, el visible y las porciones infrarrojo.

En los medios de noticias se suelen utilizar fotografías geoestacionarias para sus pronósticos bien como imágenes o como animaciones.

El GOES-12, designado como GOES-East, está sobre el río Amazonas y proporciona la mayor parte de la información meteorológica estadounidense.

Los satélites polares están en órbitas helio síncronas, lo que significa que pueden observar cualquier lugar de la Tierra y ver dos veces al día un lugar con las mismas condiciones generales de luz debido al tiempo solar casi constante.

Además, los satélites de órbita polar ofrecen mayor resolución que sus homólogos geoestacionarios debido a su cercanía con la Tierra.

Para la lucha contra incendios, los satélites meteorológicos no solo proveen de imágenes donde se produzcan fuego.

Una vez detectado un incendio, los satélites también disponen de datos sobre el viento para averiguar hacía donde se puede extender.

También son conocidas las fotografías nocturnas del globo que muestran la luz artificial de las ciudades.

Imagen artística del GOES-8.
Composición de imágenes nocturnas de la Tierra.