Contrebia Leucade

A esto hay que sumar una superficie de 1,5 hectáreas situada en el lado sur (entre el foso principal y otros elementos complementarios de defensa) y otra de mayores dimensiones, situada al este, entre el foso y un segundo cerco, apenas perceptible en la actualidad, que marca un espacio quizá destinado al ganado.[4]​ Las etapas de su evolución podrían dividirse en varias fases que abarcan sus dos mil años de existencia en que estuvo habitada: Posteriormente, fue abandonada sobre el siglo IX,[4]​ y sus habitantes pasaron a ocupar otros poblados cercanos.Este lugar fue utilizado para enterramiento por una pequeña comunidad asentada en la llamada Peña del Recuenco.Los restos hallados en la cueva pertenecen a un solo individuo, un varón cuya edad se ha estimado sobre unos 25 años.En Contrebia Leucade se formó un primer asentamiento, en plena Edad de Hierro, siglos VI y IV a. C. aproximadamente.Igualmente, se han hallado otros poblados hallstátticos cercanos a este yacimiento en Fitero (Navarra), Arnedo La Rioja (España) y San Felices (Soria).Se cree que fue una ciudad, en principio, pelendona y posteriormente arévaca, pueblos de la meseta castellana.Estos últimos llegaron, aproximadamente, hacia el 300 a. C. Las tribus celtíberas fueron dueñas de Contrebia Leucade hasta su derrota por los romanos y la consiguiente romanización de la zona, a partir del siglo II a. C. La ciudad controlaba un territorio entre dos espacios diferentes, pero muy importantes, como eran el valle del Ebro y la meseta castellana.Tito Livio menciona muchas veces indistintamente a una población importante como oppidum, urbs o en menor medida civitas.[18]​ Fue Blas Taracena el pionero en señalar estas ruinas como pertenecientes a Contrebia Leucade.Tras una primera visita, publicó un artículo que puso a este yacimiento en un lugar destacado en la historiografía moderna.En él detalla el perímetro del yacimiento arqueológico y sus elementos más importantes, concluyendo que las ruinas debían pertenecer a Contrebia Leucade, la ciudad celtibérica citada por Livio en relación a los acontecimientos que tienen lugar entre el 77 y 76 a. C.[19]​ Se han hallado: Destacan especialmente sus sistemas de colector de aguas sucias; unas cloacas que en parte están visibles y sorprenden por su elaborada construcción con losas de gran tamaño.Cada torreón tiene unos setenta metros cuadrados, con subdivisión interna en dos habitaciones, una construcción nominada como torres de cajones.En la campaña del 143-142 a. C., en que fue conquistada por Quinto Cecilio Metelo, se la describe como inexpugnable ciudad hispánica (Veleyo, II, 5, 2).
Posible extensión de la Celtiberia. arévacos pelendones berones belos tittos lobetanos lusones
Cerámica con boquique , Cogotas I .
Distribución aproximada de los arévacos.
Norte de España en el siglo I a. C
Restos de viviendas.
Muralla y base de torreón romanos.
Muralla y foso celtíberos.