Los primeros controlaban Roma pero estaban perdiendo el resto de los territorios de la república: Sila estaba con un poderoso ejército negociando la paz con Mitrídates VI para volver a la capital; Quinto Cecilio Metelo Pío se alzaba en África y daba muerte al propretor Cayo Fabio Adriano en Útica; Marco Licinio Craso estaba refugiado en Hispania Ulterior, donde había reclutado un pequeño ejército y se preparaba para volver a Italia; y un joven Cneo Pompeyo Magno se alzaba en el Piceno.
El joven Pompeyo marcha a Sicilia, donde Gneo Papirio Carbón había huido y alzado en armas.
[13] Tras esta traición, el resto de los defensores se rindieron y Annio entró en la península sin resistencia.
[15] Llegaron a Mauritania, donde había una gran comunidad de populares exiliados y también numerosos piratas cilicios.
El reino estaba en plena guerra civil, Boco I era aliado de Sila y combatía a los rebeldes.
[21] Poco después vencía al propretor Cayo Aurelio Cota, enviado con una pequeña flota por Sila, en un combate naval frente a Mellaria.
[27] Rápidamente usó el fuerte sentimiento antirromano en la región para ganar apoyo e invadir la Citerior, instalando su base de operaciones en Calagurris.
Sertorio apenas tenía 8000 soldados, por lo que decidió evitar el combate campal y usar la guerra de guerrillas.
[29][20] Estas victorias lo hicieron muy popular entre los locales y hábilmente decidió instituir un Senado a la manera romana pero formado por la nobleza hispana en Osca o Bolskan.
En el año 78 a. C. Perpenna, que estaba intentando resistir en Sardinia, decidió refugiarse con 20 000 infantes y 1500 jinetes junto a Sertorio.
[32] Mientras, Hirtuleyo seguía su ofensiva hasta Ilerda, donde derrotaba al procónsul de la Galia Narbonense, Lucio Manlio, que había entrado en Hispania para ayudar a Calvino.
Para entonces, el procónsul rebelde tenía 8000 jinetes y 60 000 infantes, dos tercios locales, pero solo 2000 legionarios veteranos al mando de Perpenna.
Envió al cuestor Cayo Memio para que trajera una legión desde la Ulterior para unirse a él en Cartago Nova.
Tratando de conseguir víveres, se produjo una escaramuza entre partidas enemigas, el legado optimate Decio Lelio intentó ayudar a los suyos pero fue vencido con 10 000 bajas.
Poco después, Laurón se rindió y Sertorio no hizo daño a la población, pero quemó completamente la urbe.
Al general optimate no le quedó más opción que refugiarse en la Galia Narbonense.
Pompeyo conquistó fácilmente Edetania hasta llegar a Sucrone, que contaba con el único puente que atravesaba el Sucrón; ahí se presentó también Sertorio, deseoso de vengar la derrota de Laurón y demasiado cerca del enemigo como para esperar a Metelo.
A finales del verano, el caudillo rebelde cercó en Sagunto al legado Gayo Memio y 30.000 soldados.
En 74 a. C. Sertorio aplicó la táctica de tierra quemada para evitar el combate, mientras que Pompeyo y Metelo atacaban ciudades para provocarlo.
En cambio, en Cauca los optimates introdujeron soldados supuestamente enfermos que buscaban ayuda médica y abrieron las puertas al ejército a la primera oportunidad.
Sertorio se concentró en el valle del Ebro, en las ciudades de Ilerda, Osca y Calagurris, cada vez con menos aliados.
[43] Todos los compañeros de Perpenna fueron muertos, algunos por Pompeyo y otros por los mauritanos cuando huyeron a África.