Beatos de México

Los beatos y santos de la Iglesia Católica de México, han venido surgiendo desde el siglo XVIII, hasta el siglo XX, donde la mayor parte de esos beatos y santos fueron sacerdotes y laicos que fueron víctimas en la llamada “Guerra cristera” (1926-1929), que enfrentó a la Iglesia Católica con el Estado, a raíz de las leyes promulgadas por Plutarco Elías Calles.Una beatificación es un acto en el que el Papa, autoridad máxima de la Iglesia Católica, y después de un proceso exhaustivo, permite el culto local del que una persona, que ya ha sido nombrada primeramente Siervo de Dios, hace pública su decisión, mediante una Carta apostólica.Después de la beatificación puede proceder una canonización.Se consideran beatos y santos de México a todas aquellas personas, que ya sea fueron nacidos, o vivieron, o tuvieron una estrecha relación con México, y ahí se incluyen a los que: Los que nacieron y murieron en México; los que nacieron en México pero murieron en el extranjero, como San Felipe de Jesús; los que nacieron en el extranjero y murieron en México, como el beato Sebastián de Aparicio y los que nacieron en el extranjero pero influyeron culturalmente de manera notable en nuestro país y finalmente murieron en el extranjero, como es el caso del beato Juan de Palafox, Virrey de Nueva España y Arzobispo de Puebla."El buen camino" de Carlos Villa Roiz, de la oficina de Comunicación del Arzobispado Primado de México, (2009).