[1] Nació el 14 de abril de 1877 en el Municipio de Atoyac, en Jalisco, México, en una familia sumida en la pobreza, pero logró salir adelante haciendo sus primeros estudios en Zapotlán y muy pronto manifestó su inclinación por la vida clerical.
Las limitaciones materiales cribaron su adolescencia, carecía de recursos para adquirir los libros de texto, razón por la cual debió cursar muchas asignaturas tomando notas y usando los impresos de sus condiscípulos y sufrió muchas carencias en sus estudios, sin embargo destacó por ser un buen estudiante, estimado por compañeros y superiores.
Destacó como un sacerdote ejemplar, ejerció su apostolado en un medio difícil por el anticlericalismo y la indiferencia religiosa.
En 1928, cuando la persecución de la Guerra Cristera avanzó, decidió refugiarse con los suyos.
La respuesta fue una lluvia de balas, así Justino, José María y Altiano fallecieron juntos.