Alfonso Carrillo de Acuña
[2][3] Cuando los Reyes Católicos se hicieron con el poder, al morir Enrique IV en diciembre de 1474, rápidamente chocaron sus intereses.Esta situación le llevó a un enfrentamiento con el Mendoza que perdería en la subsiguiente Guerra de Sucesión Castellana (1475-1479).Dando un giro absoluto a su política, Carrillo se integró en el bando liderado por el rey de Portugal que apoyaba los derechos al trono castellano de su sobrina la princesa Juana contra Isabel la Católica.Tras la desamortización de éste, sus restos fueron trasladados a la actual Catedral de los Santos Niños Justo y Pastor,[5][6] por lo que fue víctima del incendio que sufrió dicha catedral en 1936, habiendo sido restaurado en 1997 y 2018.Está esculpido en alabastro en los años ochenta del siglo XV y se atribuye al maestro Sebastián de Toledo.El personaje del arzobispo Carrillo, interpretado por Pedro Casablanc, aparece en las temporadas primera y segunda de la serie televisiva Isabel.