Presenta diversas coloraciones según las impurezas que contiene, desde el rojo anaranjado hasta el blanco.Físicamente se considera un coloide[cita requerida], de partículas extremadamente pequeñas y superficie lisa.Átomos de aluminio y hierro pueden reemplazar parcialmente al silicio en la estructura.[2] Los minerales de la arcilla se suelen definir según composiciones químicas idealizadas.Dependiendo del contenido mineral de la tierra, la arcilla, puede aparecer en varios colores, desde un pálido gris a un oscuro rojo anaranjado.Ladrillos, vasijas, platos, objetos de arte, e incluso sarcófagos o instrumentos musicales, tales como la ocarina, fueron y son modelados con arcilla.Los arqueólogos utilizan las características magnéticas de la arcilla cocida encontrada en bases de hogueras, hornos, etc, para fechar los elementos arcillosos que han permanecido con la misma orientación, y compararlos con otros periodos históricos.Su nombre procede de las bolas que hacían los mineros para facilitar su extracción.La meteorización ácida de rocas ricas en feldespato, como el granito, en climas cálidos tiende a producir caolín.La meteorización del mismo tipo de roca en condiciones alcalinas produce ilita.Las arcillas primarias se forman como depósitos residuales en el suelo y permanecen en el sitio de formación.El clorito, vermiculita,[9] talco y pirofilita[10] a veces también se clasifican como minerales arcillosos.[12] Una varva (o arcilla varvada) es arcilla con capas anuales visibles que se forman por la deposición estacional de esas capas y están marcadas por diferencias en erosión y contenido orgánico.[13] Es una arcilla muy sensible, propensa a la licuefacción del suelo, y ha estado involucrada en varios deslizamientos de tierra mortales.
Arcillas del Jurásico. Proximidades de
Weymouth
, Inglaterra, Reino Unido.
Mineros de arcilla italianos y afroamericanos en una mina, 1910