[2][5] Fue el octavo hijo de los campesinos Jean Tounens (1781-1862)[6] y Catherine Jardon.
Las fuentes históricas, escasas, aseguran que tuvo cierto contacto con algunas autoridades del pueblo mapuche, si bien el sedicente rey nunca tuvo el control de ningún punto del territorio.
Las autoridades tradicionales mapuches continuaron en funciones, no se alteraron las costumbres y el estado nunca llegó a establecerse.
Tounens viajó a Valparaíso para dar a conocer su reino al gobierno de Chile, en aquel entonces bajo la presidencia de Manuel Montt, quien no reconoció el nuevo Estado.
Acusado por perturbar el orden público, fue condenado en primera instancia a diez años de cárcel.
[4] En Europa, Tounens promocionó su aventura, siendo apoyado por algunos empresarios para financiar un segundo viaje, realizado a fines de 1869.
Se supone que en esta ocasión arribó con un navío cargado con armas y algunos pertrechos militares.
A su regreso a la Araucanía, la situación había cambiado: en sus nueve años de ausencia, el Estado de Chile había empezado la colonización del territorio y el dominio sobre los mapuches.
[1] Al saber que el coronel Saavedra había puesto precio a su cabeza, dejó Chile en 1871[2] con destino a Buenos Aires, adonde llegó en julio de ese año.
[12] Antoine de Tounens no tuvo hijos, pero desde su muerte en 1878, ciudadanos franceses sin ninguna relación familiar con él se declaran pretendientes al trono de la Araucanía y la Patagonia sin que quede claro si los aborígenes mapuches aceptan o están informados.