A temperatura ambiente se presenta como un líquido ligero (de baja densidad), incoloro, inflamable y tóxico que se emplea como anticongelante, disolvente y combustible.
[2] Pequeñas cantidades de metanol están presentes en personas normales y sanas.
En 1834, los químicos franceses Jean-Baptiste Dumas y Eugene Peligot determinaron su composición elemental.
El término "metilo" fue creado alrededor de 1840 por abreviatura de metileno, y después fue utilizado para describir el alcohol metílico; expresión que la Conferencia Internacional sobre Nomenclatura Química redujo a «metanol» en 1892.
Es un disolvente industrial y se emplea como materia prima en la fabricación de formaldehído.
La conversión conlleva una oxidación: El ácido acético puede producirse a partir del metanol.
El metanol y el isobuteno se combinan para dar metil tert-butil éter (MTBE).
[16][17] El metanol es un vector energético prometedor porque, como líquido, es más fácil de almacenar que el hidrógeno y el gas natural.
Otras ventajas del metanol son su fácil biodegradabilidad y su baja toxicidad medioambiental.
[18] El metanol se utiliza ocasionalmente para alimentar motores de combustión internas.
Su uso está desplazando al carbón, que se encuentra bajo la presión de unas normativas medioambientales cada vez más estrictas.
Asimismo, el alcohol puede gelificarse para reducir el riesgo de fugas o derrames, como ocurre con la marca "Sterno".
Se utilizó durante la ley seca en los Estados Unidos para desincentivar el consumo de licor ilegal, y acabó causando varias muertes.
[26] En la actualidad, este tipo de prácticas son ilegales en Estados Unidos, considerándose homicidio.
En concentraciones elevadas (o menores en comparación con el alcohol etílico) el metanol puede causar dolor de cabeza, mareo, náuseas, vómitos y muerte (la ingestión de una dosis entre 20 ml a 150 ml es mortal[32]).
Las características clínicas de la intoxicación aguda por metanol incluyen acidemia fórmica, acidosis metabólica, toxicidad visual, coma y en casos extremos la muerte.
En España (con mayor incidencia en Galicia y Canarias), en 1963 se produjo una intoxicación masiva de personas que habían bebido aguardiente adulterado con metanol, cuyo origen se ubicó en una bodega de Orense.
Su acción citotóxica se ejerce de manera diferenciada sobre los fotorreceptores, con una recuperación parcial de las respuestas dominadas por los bastones y ninguna recuperación sobre las respuestas mediadas por conos ultravioleta.
Estos metabolitos se acumulan en el organismo en las 12-24 horas posteriores a la intoxicación.
El etanol actúa como antídoto ya que se une selectiva y competitivamente al ADH, a través de la misma vía enzimática.