Estudió la secundaria y bachillerato en el Colegio San Agustín de Cochabamba con una beca durante cuatro años.
Su juventud, según él mismo ha explicado, quedó marcada con la lectura de Karl Marx y Lenin.
Regresó a Bolivia en 1984 con Raquel Gutiérrez y establecieron contacto con dirigentes campesinos y mineros, entre ellos Felipe Quispe,[7] fundador del Movimiento Indígena Túpac Katari en 1978, quien les introdujo a las comunidades aimaras.
Es la época — según su biografía oficial — en la que conoció al dirigente cocalero Evo Morales.
[15] Confinado junto a los principales dirigentes del EGTK en la cárcel de Chonchocoro, en prisión preventiva, sin sentencia durante cinco años, Álvaro García Linera estudió Sociología de manera autodidacta[16] —no obtuvo el título de graduado tras ser liberado—[17] y continuó trabajando sobre la teoría marxista plasmando su reflexión en el libro Forma Valor, Forma Comunidad.
En abril de 1997, por no haber alcanzado su juicio una sentencia, García Linera y otros miembros del EGTK son liberados.
Una vez en libertad retomó su activismo para crear una estructura política que permitiera avanzar en el objetivo de la toma del poder por un bloque popular.
La segunda vez que le encontró fue en abril cuando estalló la protesta por el alza de tarifas.
También ganó notoriedad por participar en debates televisivos, integrando el panel del programa Pentágono.
Durante su mandato desde la vicepresidencia alimenta la reflexión teórico-académica del proceso acompañando el camino político.
Entre los intelectuales que participaron en dichos ciclos se encuentran David Harvey, Antonio Negri, Michael Hardt, Slavoj Žižek, junto a intelectuales bolivianos como Luis Tapia o el propio García Linera.
[21] En diciembre de 2016 anunció que no formaría dupla electoral con Evo Morales para siguientes elecciones.
Sin embargo, las elecciones fueron criticadas por sectores de la sociedad y por organizaciones internacionales como la OEA.
Presionados desde diversos frentes, Morales y García Linera anunciaron su renuncia al cargo para el que tenían mandato hasta enero de 2020, posteriormente la opositora y segunda vicepresidenta del senado Jeanine Áñez se autoproclamaría presidenta del país.
[31] Entre las personas que más ha cuestionado públicamente a García Linera se encuentra Felipe Quispe, con quien compartió los primeros años de lucha con el movimiento indígena y adversario político de Evo Morales.