El Túpolev Tu-160 «Cisne blanco» (en ruso: Туполев Ту-160 «Белый лебедь» o «Белый лéбедь») (transliterado como Belyi Liebed o Belyj Lebed’, designación OTAN: Blackjack[2]) es un bombardero pesado supersónico de geometría variable desarrollado por Túpolev en la Unión Soviética.
Entró en servicio en 1987 y continúa activo en la Fuerza Aérea Rusa con un total de 16 unidades.
El primer concurso para el diseño y construcción, de un bombardero estratégico supersónico en la Unión Soviética, comenzó en 1967.
Pero se concluyó, que ese tipo de avión bombardero supersónico sería demasiado especializado, caro, difícil de producir y controlar, por lo que se redujeron los requisitos.
En ese momento, el proyecto del bombardero XB-70 ya se había cancelado en Estados Unidos por su alto costo, complejidad y dificultades técnicas.
La nueva versión de Myasishchev, que utilizaba alas de geometría variable y tenía forma de Ala voladora, como el avión Northrop Grumman B-2 Spirit fabricado años más tarde en occidente, fue considerada la más apta para lograr cumplir con los requerimientos del gobierno, pero la mejor organización del proyecto de Túpolev y su experiencia, fue considerada como la que tenía mayor potencial para lograr finalizar el proyecto.
Aunque el bombardero occidental B-1A supersónico fue cancelado en 1977, la producción del nuevo bombardero soviético supersónico continuaba y ese mismo año, el diseño final fue aceptado por el comité del gobierno.
Al renunciar a su arsenal nuclear, Ucrania destruyó los restantes Tu-160, excepto uno que permanece en exhibición.
El comandante Igor Jvorov afirma que durante ejercicios realizados en abril de 2006, el Tu-160 llegó hasta Canadá vía Polo Norte y no fue detectado por ningún sistema de defensa antiaérea estadounidense.
Otros dos aviones estaban en construcción, entrando uno más en servicio en marzo de 2006 y el otro, al siguiente año.
Éste ha sido el ejercicio aéreo más grande realizado por Rusia hasta ahora, participando también 141 Tu-22M3, y 40 Tu-95MS.
A diferencia del bombardero occidental Rockwell B-1 Lancer, que desechó el requisito de velocidad supersónica Mach 2 como el diseño B-1A original.
Las fuentes rusas afirman que debido a este diseño, su sección de radar (RCS en inglés, radar cross section) es menor que la del bombardero Boeing B-52 Stratofortress y el B-1B Lancer, aunque no se ha verificado por fuentes independientes.
Actualmente Rusia decidió volver a retomar su producción,[6] y según el anuncio del comandante de la fuerza aérea rusa (VVS), Viktor Bondarev, ha afirmado que se van a adquirir al menos 50 Tu-160.
[8] La incursión terminó cuando los aviones Tu-160 rusos dejaron el espacio aéreo colombiano, encendiendo los motores de post combustión para aumentar su velocidad, sin más percances; este conflicto se presentó en un momento de tensiones diplomáticas entre Colombia y Nicaragua, a su vez las relaciones con Venezuela no eran las mejores, Colombia había movilizado fragatas y submarinos a la zona limítrofe con Nicaragua.
[cita requerida] En 2006 las fuerzas aéreas rusas recibieron cinco aviones modernizados y otro recién construido.
En 1995, Túpolev anunció una asociación con la firma alemana OHB-System para fabricar el avión como un carguero, para un vehículo de lanzamiento orbital.