A su regreso se instaló definitivamente en Madrid y trabajó para la revista Museo Español de Antigüedades.
[4]Ricardo Velázquez dedicó catorce años a las excavaciones y restauraciones del yacimiento de Medina Azahara.
También actuó en la Alhambra de Granada, recuperando el espacio cuyo proyecto continuó Torres Balbás.
[2] Practicó un historicismo eclecticista de corte academicista que le enfrentó al modernismo.
Arquitectos como Antonio Palacios, que siguió su tendencia monumentalista, se vieron influidos por su estilo.