Monumento a los Descubridores

El proyecto original constaba de un pedestal hexagonal con varios cuerpos, que servía como zócalo de una columna, coronada por un globo terráqueo.[2]​ Entre 1963 y 1967 el monumento experimentó una restauración Luis Martínez-Feduchi, que alteró sustancialmente la obra original.[2]​[4]​ En los albores del siglo XXI, el monumento se encontraba en un estado de conservación muy deficiente.[5]​[6]​[7]​ Una nueva restauración, que pretendía consolidar el monumento instalando un núcleo de hormigón armado, aprovecharía para recuperar también elementos de la obra original, como el orbe terráqueo o una corona; se ejecutó durante la década de 2010.[9]​[10]​ Tres cabezas talladas representando a nativos americanos (al parecer correspondientes a las civilizaciones azteca, maya y taína) parte del monumento original fueron halladas enterradas bajo este hacia 2011 durante el desmontaje de la columna.
Grabado basado en un bosquejo de Juan Comba publicado en La Ilustración Española y Americana ilustrando la inauguración del monumento.