Este ataque temprano permitió a las fuerzas aliadas algo de tiempo para preparar medidas defensivas.
[8][9] Posteriormente, el gobierno de Lyndon B. Johnson buscó negociaciones para poner fin a la guerra.
[12] La ofensiva del Tet tiene un precedente en la guerra de Indochina, cuando el Viet Minh anunció con gran despliegue propagandístico que Hồ Chí Minh estaría en Hanói para celebrar el Año Nuevo Vietnamita (fiesta del Tết, o en vietnamita: Tết Nguyên Dán).
Las dos fuerzas deberían ejercer una presión tal sobre el Ejército de Vietnam del Sur que se desmoronaría y la victoria, si no completa, estaría mucho más cerca.
En combates como estos se forjó el legendario cuerpo de los Pijamas Negros, los miembros del Vietcong que vestían esta prenda tradicional vietnamita y que se encadenaban a los árboles, arrojaban lejos la llave y combatían con su fusil o subfusil sin posibilidades de retirada ni rendición.
Los combates resultaron muy duros y la destrucción que sufrieron las ciudades por el empleo de armas pesadas fue muy grande.
[cita requerida] El ejemplo más dramático lo constituyó la ciudad imperial de Hué, que quedó prácticamente arrasada.
[cita requerida] Pero salvo casos como ese, en pocas horas o algunos días a más tardar, la totalidad de lo perdido estaba recuperado.
Sin embargo, esta vez la inteligencia aliada estaba mejor preparada, quitando el elemento de sorpresa.
Trece batallones del Vietcong lograron penetrar la barrera y una vez más el caos reinó en la capital.
1.800 soldados estadounidenses y survietnamitas fueron aislados, y bajo un intenso ataque, el Comando de Asistencia Militar para Vietnam tomó la decisión de evacuar Kham Duc por vía aérea, abandonándola a los norvietnamitas.
El 16 de agosto, los marines estadounidenses se adelantaron a un avance contra Da Nang.
Saigón fue azotada de nuevo durante esta etapa, pero los ataques eran menos sostenidos y fueron una vez más fácilmente repelidos.
Sin embargo, como el historiador Ronald Spector ha señalado «los fracasos comunistas no fueron definitivos o determinantes tampoco».
Las bajas horrendas y los sufrimientos padecidos por las unidades comunistas durante estas operaciones sostenidas empezaban a hacerse notar.
El 5 de abril de 1969, la Oficina Central para Vietnam del Sur emitió la Directiva n.º 55 a todas sus unidades subordinadas: Para los militares estadounidenses, la victoria era completa,[cita requerida] pues habían destruido casi totalmente al Vietcong y a las unidades infiltradas del EVN, unas 37.000 bajas confirmadas y quizá unas 50.000 calculadas por el Pentágono,[cita requerida], aunque las de los aliados tampoco fueron desdeñables.
[cita requerida] En operaciones como esta se sabe muy poco de la postura vietnamita porque siempre han sido un libro cerrado.
Siempre se ha considerado al general Vo Nguyen Giap un hombre cauto, buen estratega y que difícilmente caía dos veces en el mismo error.
[cita requerida] Por eso sorprende una ofensiva como la del Tet donde militarmente tenía todas las de perder, detalle que él conocía perfectamente.
Un defecto que ya le llevó a sufrir numerosas bajas en Dien Bien Phu.
[cita requerida] Sin embargo, el propio general declaró que esta posibilidad no se tuvo en cuenta en la práctica y que el objetivo real era poner contra las cuerdas al gobierno del Sur mediante un fuerte desgaste.
Además se les mandaba resistir contra un enemigo con una potencia de fuego y una movilidad inmensamente superior a la suya, cosa que aprendieron con sangre en la operación Starlite.
Pero resulta muy difícil saber si estos postulados son correctos o no sin tener acceso a las fuentes vietnamitas.
Pese a que la ofensiva del Tet presenta pocos puntos de comparación con otras batallas posteriores, como la batalla de Mogadiscio, siempre se la ha tomado como un referente ante cualquier situación donde las fuerzas estadounidenses no conseguían una victoria contundente.
El presidente respondió que ambas situaciones sí se parecían, pese a la posterior matización oficial emitida por la Casa Blanca según la cual la comparación era entre las escaladas de actividad, no entre la marcha de ambas guerras.