Elecciones presidenciales de Estados Unidos de 1968

La elección también incluyó al exgobernador de Alabama, George Wallace, quien se postuló como candidato del nuevo Partido Independiente Americano.

En 1964, el presidente Lyndon B. Johnson había derrotado al republicano Barry Goldwater por la más aplastante mayoría vista hasta entonces.

Pese a su impopularidad, en un principio Johnson se perfilaba como el nominado, al haber poco interés de hacerle frente entre los demócratas para evitar una probable crisis partidaria.

Pero Humphrey, pese a no participar en ninguna fecha (optando por hacer competir a sus "delfines"), logró una ventaja considerable al predominar aún un sistema mayoritariamente cerrado, en el cual los electores eran elegidos en "caucuses" o en convenciones regionales (usualmente por "jefes" políticos).

McCarthy fue vitoreado en las universidades mientras que Kennedy hizo campaña en los guetos negros y los "barrios" hispanos.

Los brutales enfrentamientos entre la policía y los manifestantes fueron emitidos por televisión, dejando al partido Demócrata en mal pie.

Otro pretendiente fue el senador por Illinois Charles Percy, aunque nunca hizo campaña de manera activa.

Sin embargo, en los últimos meses de la campaña, los gobernadores Nelson Rockefeller (Nueva York) y Ronald Reagan (California), líderes respectivamente de las facciones liberal y conservadora del partido quienes se enfrentaron a Nixon.

Para cuando abrió la convención en Miami Beach el 5 de agosto, ambos gobernadores unieron fuerzas para detener a Nixon, quien necesitaba 11 delegados para alcanzar la nominación.

Esta organización ultraconservadora nominó como candidato al demócrata George Wallace, exgobernador de Alabama cuyos pensamientos favorables a la segregación racial fueron rechazados por su partido.