Es entonces cuando ella, inconscientemente, ya que todavía no es consciente de sus poderes aunque los siente, hace que el televisor explote, siendo ésta la primera señal de sus poderes telequinéticos.
Ésta escuela es dirigida por Agatha Trunchbull (Agatha Tronchatoro en Hispanoamérica) (Pam Ferris), una mujer extremadamente estricta y de carácter fuerte, dominante, cruel, vil y perversa, que Harry conoció en su negocio cuando ella acudió a comprarse un auto seminuevo.
Cuando a una niña llamada Amanda Tripp la insulta por sus trenzas, le aplica lanzamiento de martillo a ella jalándole las trenzas, y sale disparada por el aire, hasta que aterriza en un campo de flores.
Su agradable maestra, la señorita Jennifer Honey (Jennifer Miel en Hispanoamérica) (Embeth Davidtz), pronto se da cuenta de sus capacidades, y por ello solicita una audiencia con la directora Tronchatoro, para pedirle que pasen a Matilda a una clase más avanzada, pero la malvada directora se niega, arguyendo que se trata de una estratagema de la señorita Miel por librarse de Matilda, al creer en su paranoia que Matilda le cae tan mal a la maestra como a ella.
Luego Matilda descubre que el FBI vigila a su familia debido al negocio sucio de su padre, pero sus padres se niegan a creerle, creyendo que los policías eran vendedores de lanchas deportivas, como los mismos agentes del FBI, les habían hecho creer.
Cuando ella acusa a Matilda de haberlo hecho, ésta se pone tan molesta que le vuelca encima el vaso con sus ojos desde su silla.
Al darse cuenta de ello, intenta hacerlo adrede de nuevo mostrarle a la señorita Miel a solas que ha sido ella quien lo hizo, pero como aún no domina sus poderes, no lo consiguió.
Tras eso, y en un descuido de la señorita Miel, Matilda se cuela en la casa y ella se ve obligada a seguirla, entrando así en la casa en la que creció después de años sin poner un pie en ella.
En mitad de todo esto, la señorita Tronchatoro regresa enloquecida porque el defectuoso coche que le vendió Harry Wormwood la había dejado tirada unos metros delante de la casa, por lo que regresó para llamarle por teléfono y leerle la cartilla, pero justo antes de colgar detectó que había intrusos en la casa.
Tras ello, Matilda, que ya dominaba sus poderes, se decidió a darle una última oportunidad a su padre de reformarse y dejar la estafa de los automóviles, saboteando una pesquisa sin orden judicial que realizaban los detectives y posteriormente derrotar a su directora en su propio juego.
Cuando estuvo a punto de salir en la noche a la casa de la señorita Tronchatoro, el hermano Michael le pregunta que adonde va y le lanza una zanahoria, quien también le da una lección a él, haciendo gravitar la zanahoria y que cae en su boca, así como venganza porque ya está cansada de sus maltratos.
Satisfecha, Matilda bajó del tejado y se regresó a su casa, pero sin notarlo perdió su cinta del pelo, con tan mala suerte que el viento se la trajo desde la rama del árbol en la que se enredó hasta el seguro de la puerta del auto a la señorita Tronchatoro, que en ese momento se disponía a huir despavorida.
Matilda, habiéndose imaginado de antemano que algo así ocurriría, ya trajo trazado un plan: usando sus poderes hizo levitar la tiza para escribir en la pizarra un mensaje amenazador a la señorita Trunchbull fingiendo ser el fantasma del padre de la señorita Miel, "Magnus", diciéndole que acabaría con ella como ella acabó con él si no le devolvía a su hija su dinero y la Casa familiar.