Los discursos y los gestos de Agüero atraían a todas las clases sociales del pueblo.Dicha avenida se llama así en honor del presidente de los Estados Unidos Franklin D. Roosevelt desde 1945.[7][8] El doctor Julio Ignacio Cardoze, quien años más tarde sería viceministro del Trabajo en el gobierno del general Anastasio Tacho Somoza, andaba allí no vio a nadie armado en la manifestación (pero la guardia si recibió los disparos de estos) y le fue a avisar a Chamorro, Agüero, Manolo Morales Peralta, etc quienes estaban a 5 cuadras al norte de la cabeza de la manifestación, sentados en la acera del Edificio Carlos, frente al costado este del Almacén Carlos Cardenal.[14][3][6][7] Pero no se descarta que había exaltados armados entre la gente (ya existía la guerrilla del Frente Sandinista de Liberación Nacional apoyada por la prensa y la UNO el FSLN, fundado en 1961 por Fidel Castro y armados por la Unión Soviética con su jefe Carlos Fonseca Amador, para combatir al gobierno de Somoza).Los guardias abrieron fuego con sus fusiles semiautomáticos M1 Garand calibre 7,62 x 63 milímetros, primero desde la mencionada avenida y después parapetándose detrás del edificio del Banco Central de Nicaragua (BCN) ubicado frente al costado sur del BNN; hubo entre 100 y 200 muertos según la cruz roja, los dirigentes de la UNO se refugiaron en el Gran Hotel (actual Centro Cultural Managua) situado a 2 cuadras al norte de donde ellos estaban antes, por lo que un tanque Sherman (mandada por el General Iván Allegret) cañoneó a ese edificio.[17] Dos semanas más tarde, el domingo 5 de febrero de 1967, el pueblo nicaragüense votó y ganó el general Anastasio Tachito Somoza Debayle (del oficialista Partido Liberal Nacionalista, PLN), y perdió Fernando Agüero Rocha.[7] La matanza puede ser comparada con otras masacres que se han dado en todo el mundo, tales como:
Fusil semiautomático
M1 Garand
estadounidense usado en la masacre.
Maqueta del Paseo Xolotlán, que representa al antiguo edificio del
Banco Central de Nicaragua
, dañado por el
terremoto de 1972
y parcialmente demolido, tras el cual se parapetaron los soldados de la Guardia Nacional después de iniciar la masacre.